Los teléfonos celulares emiten radiación de radiofrecuencia no ionizante, a través de sus antenas y las partes del cuerpo más cercanas a esta pueden absorber la energía.

Los smartphones son esenciales para el día a día, ya que a través de ellos las personas se comunican, se informan e incluso se distraen. Por ende, es común que estos estén en las manos, en los bolsillos o debajo de la almohada, siempre muy cerca del cuerpo.

Sin embargo, los celulares emiten radiación que a largo plazo puede incluso perjudicar en la vida de quienes los utilizan. Hay dispositivos que emiten mucho más radiación que otros.

Según el informe de la Oficina Alemana para la Protección contra la Radiación, citado por Statista y realizado con estudios hasta el 9 de diciembre de 2021, existen 8 smartphones que se ubican en los primeros lugares.

Las emisiones de los aparatos se miden a través del valor SAR (tasa de absorción específica). Aquellos que emiten menor radiación son los que marcan una cifra inferior a 0,25.

Lista de smartphones que emiten más radiación
Statista

El Motorola Edge registró un valor SAR más alto que todos los otros dispositivos del mercado, con una radiación 1,79 vatios de intensidad por kilogramo (W/kg). Así, tuvo el mayor nivel a la hora de realizar una llamada con el dispositivo situado en la oreja. El dispositivo no se encontraría a la venta en territorio nacional.

Motorola Edge
Motorola

El ZTE Axon 11 5G le sigue en segundo lugar con una radiación de 1,59 W/k, sin embargo este modelo no se encontraría disponible en el mercado chileno.

ZTE Axon 11 5G
ZTE

En tercer lugar se encuentra el OnePlus 6T, con 1,55 W/kg. Este smartphone sí está a la venta en el país y su precio ronda entre los $250.000 a $300.000.

OnePlus 6T
OnePlus

En el número 4 de la lista está el Sony Xperia XA2 Plus, que tiene una radiación de 1,41 W/kg. Aunque no está disponible para comprar en tiendas del país, su página oficial tiene la alternativa de pedir online.

Sony Xperia XA2 Plus
Sony

En el puesto número cinco, los modelos Pixel 3XL y 3a XL de Google, ambos con 1,39 W/Kg de radiación.

El 3a XL, solo está disponible en la página de Linio, mientras que el 3XL, es comercializado ampliamente en tiendas y su precio ronda entre los $220.000 a $300.000.

Google Pixel 3 XL y  3a XL
Google

En sexto lugar también está el dispositivo perteneciente a la gran G, el Pixel 4a, que tiene 1,37 W/Kg de radiación. Este no estaría en el mercado chileno.

Google Pixel 4a
Pixel

En séptimo lugar se ubica el Oppo Reno 5G que al igual que el anterior cuenta con 1,37 W/K de radiación, aunque no estaría a la venta oficialmente en Chile.

Oppo Reno 5G
Oppo

En el último puesto se encuentra el Xperia XZ1 Compact, que cuenta con 1,36 W/Kg de radiación. Este dispositivo ya no estaría disponible para comprarlo, considerando que es un modelo de 2017, aunque es probable que aún hayan personas que lo tengan.

Sony Xperia XZ1 Compact
Sony

¿Qué es y cómo afecta la radiación?

La radiación de radiofrecuencia es una forma de radiación electromagnética, consigna el Instituto Nacional del Cáncer en Chile.

Esta se puede clasificar en dos tipos: ionizante (p. ej., los rayos X, el radón y los rayos cósmicos), y no ionizante (p. ej., la radiofrecuencia y la frecuencia baja en extremo o la frecuencia de electricidad).

Los teléfonos celulares emiten radiación de radiofrecuencia no ionizante, a través de sus antenas y las partes del cuerpo más cercanas a esta pueden absorber la energía.

Según la Sociedad Estadounidense contra el Cáncer (ACS, por sus siglas en inglés) esas ondas “no son lo suficientemente fuertes como para causar cáncer” pues, a diferencia de los tipos más potentes de radiación (ionizante), no pueden romper los enlaces químicos en el ADN.

Desde el portal de la BBC detallan, además, que el tema está siendo revisado por expertos y la autora Emilie van Deventer -que ha hecho más de 50 publicaciones científicas sobre radiaciones no ionizantes- dice que la OMS lo está investigando de nuevo.

Cerebro y electricidad
Pixabay

Y aunque apuntó a que hay falta de evidencia, dijo que existen “riesgos potenciales a largo plazo”. Estos, especialmente relacionados con tumores en la cabeza y en el cuello, afirmó la especialista.