Es normal que cada cierto tiempo un asteroide pase cerca de nuestro planeta. De hecho, más de alguno ha penetrado en la atmósfera, provocando daños en ciertas localidades.

Para la tranquilidad de muchos, las probabilidades de que un cuerpo de grandes proporciones provoque un devastador efecto en la Tierra es sumamente bajo.

No obstante, esta posibilidad siempre está, razón por la cual los científicos han estado trabajando en diferentes ideas para enfrentar este hipotético escenario.

Es más, tal como recoge el sitio norteamericano Engadget, recientemente el Consejo Ministerial de la Agencia Espacial Europea (ESA) aprobó un plan cuyo objetivo es desviar asteroides que podrían poner en riesgo la vida humana. Se trata de la misión Hera, bautizada así en honor a la diosa griega del matrimonio.

El proyecto, que cuenta con colaboración de la NASA, consiste en el lanzamiento de dos naves espaciales que se dirigirán a un sistema binario de asteroides bautizado Didymos para impactar la sonda DART en el cuerpo más pequeño de ellos, llamado Didymoon, a una velocidad de 21.500 km/h.

Posteriormente una nave sobrevolará el asteroide y se posará en su superficie para registrar si es que hubo algún cambio en su trayectoria, aún cuando haya sido mínimo. A su vez, tomará datos del cráter provocado por el impacto de DART para enviar información a la Tierra sobre su composición.

“Hera llevará dos CubeSats a bordo, que podrán volar mucho más cerca de la superficie del asteroide, realizando estudios científicos cruciales, antes de aterrizar”, precisaron desde ESA.

Aunque Didymoon es más bien un cuerpo pequeño, tiene la dimensión suficiente como para provocar destrucción en la superficie de nuestro planeta en un hipotético caso de impacto.

Cabe señalar que esta ambiciosa misión tiene un presupuesto de 320 millones de dólares, y su objetivo es “convertir el desvío de asteroides en una técnica de defensa planetaria”, según indicaron de ESA.

A continuación te dejamos con una recreación de cómo será el impacto de DART en Didymoon.