A 7 años de su estreno, surgen datos reveladores del rodaje de “Nace una estrella”, musical que protagonizaron Lady Gaga y Bradley Cooper, quien también ofició de director del filme.
“Me siento afortunada de estar viva”, confesó la estadounidense de ascendencia italiana en diálogo con la revista Rolling Stone, donde confesó que tuvo que pedir ayuda psiquiátrica para enfrentar los compromisos laborales de su agenda. Por esos días, a su vez, alistaba la gira promocional del álbum ‘Joanne’.
“Hice la gira de ‘Nace una estrella’ tomando litio. Un día mi hermana me dijo: ‘Ya no veo a mi hermana’. Y cancelé la gira (de Joanne). Un día tuve que ir al hospital para recibir atención psiquiátrica. Necesitaba un descanso. No podía hacer nada… Me derrumbé por completo. Fue realmente aterrador”, comentó.
Sobre cómo superó este episodio, Gaga señaló: “Hubo un momento en que no creí que pudiera mejorarme… Me siento muy afortunada de estar viva. Sé que puede sonar dramático, pero sabemos cómo pueden ser las cosas”.
Sobre el mismo proceso, también destacó el rol de su prometido, el empresario estadounidense Michael Polansky. “(Soy una) persona sana y plena… Estar enamorada de alguien que se preocupa por mi verdadero yo marcó una gran diferencia. ¿Cómo aprendes a ser tú misma con alguien cuando no sabes cómo ser tú misma con nadie?”, reflexionó.
Si bien estas temáticas parecieran haber quedado al margen del proceso creativo de sus canciones, diversos portales extranjeros han hecho eco de la canción “911”, del pandémico disco “Chromatica”, donde Gaga parece hablarnos de estas vivencias.
Tras integrar el elenco de la segunda temporada de “Merlina”, la cantante lanzó este año ‘Mayhem’, álbum que la llevó a su octava gira internacional con fechas anunciadas por Norteamérica, Asia, Europa y Oceanía.
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