El músico argentino y su pareja enfrentan una delicada situación judicial: ambos fueron imputados en una investigación por presuntas lesiones y amenazas de muerte contra un vecino.

Dos residencias del cantante argentino L-Gante fueron allanadas en el marco de una investigación judicial por presuntas lesiones y amenazas de muerte del músico y su pareja contra un vecino de General Rodríguez (Buenos Aires).

De acuerdo al diario trasandino Página 12, los allanamientos ocurrieron ayer en el barrio Bicentenario, en General Rodríguez, y en un barrio privado de la localidad de Francisco Álvarez.

“Saltaron el paredón y rompieron la puerta de la casa de mi mamá para entrar”, contó el artista en un punto de prensa. “Una vez que los atendió mi mamá, fue más tranquilo”, agregó.

Según la policía, los operativos pretendían dar con el arma de fuego con que Elián Valenzuela, nombre real de L-Gante, habría amenazado a su vecino.

Lo único que encontraron en las residencias fue la réplica de una pistola Bersa Thunder calibre 9 milímetros, la cual fue descrita por el abogado del músico como “una pistola de juguete”.

Por el momento, el fundador de la “cumbia 420” quedó imputado por el delito de “abuso de arma y amenazas agravadas”, mientras que Tamara Báez, pareja y madre de su hija, está siendo investigada por “lesiones leves”.

Las diligencias legales van a continuar hoy, cuando la pareja comparezca ante la fiscal Alejandra Rodríguez de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de General Rodríguez.

La imputación, según el matutino trasandino, se ejecutó tras la recopilación de cinco testimonios de testigos y grabaciones que los muestran increpando a un joven de 21 años junto a un grupo de personas.

La presunta víctima alega que recibió una amenaza de muerte de L-Gante y que luego este disparó un arma de fuego al piso. También asegura que su madre, su hermana y su prima también fueron amenazadas.

El artista, por su parte, negó los hechos: “(Él) vive a dos casas de mi casa, como es un pibe que anda en otra yo nunca tuve trato… Quieren lucrar conmigo y hay gente que los está impulsando porque quizás son opositores míos o de alguien más grande. El movimiento es grande y quieren ensuciar a un pibe que es bueno”, dijo.

“A mí me está yendo bien ahora pero yo me acuerdo cómo iba a laburar, lo que me costó, lo que es sumar 100 pesitos por día. Que la cuenten como quieran: mi historia recién está empezando. Son gente que está accionando alrededor mío queriendo perjudicarme”, añadió.