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Resumen generado con una herramienta de Inteligencia Artificial desarrollada por BioBioChile y revisado por el autor de este artículo.

El Gobierno, el Gobernador de Santiago y el Alcalde de Providencia están endeudándose con la Plaza Italia, epicentro de manifestaciones y celebraciones en el estallido social del 2019. Se debaten entre mantener el monumento a Baquedano donde es vandalizado o trasladarlo. La iniciativa Por el plinto y la plaza propone un concurso para definir el nuevo espacio, pero el gobierno anuncia un fallo inminente sin considerar las propuestas ciudadanas y artísticas.

Cuando los costos se diluyen entre muchos o se pagarán en un futuro incierto, entonces es fácil endeudarse. Es lo que estarían haciendo el Gobierno, el Gobernador de Santiago, el Alcalde de Providencia y algunos más en relación a Plaza Italia, Plaza Baquedano o como quiera llamársela.

La plaza, que desde hace unos cuarenta años sirve para grandes manifestaciones y celebraciones ciudadanas autoconvocadas quedó en el epicentro de diversas discusiones y posturas luego del estallido social del 2019.

El tema se ha abordado como ha sido frecuente en el país. Negociando a puertas cerradas en vez de ir a los temas profundos subyacentes, de manera participativa, y llegar a soluciones democráticas y ciudadanas.

Por un lado, están quienes quieren mantener el monumento al General Baquedano, por la importancia del personaje en la Historia de Chile. Sin embargo, sabemos que ese lugar tiene un carácter poco acorde al personaje y que, como ha sido la tónica durante decenios, más bien servirá como soporte para manifestantes, rayados y lienzos.

Por otro lado, están quienes plantean que el General Baquedano tiene que estar en un lugar que esté de acuerdo a su historia y dignidad. Por último, sin ser excluyente de las anteriores, está iniciativa Por el plinto y la plaza, que propone un concurso amplio y abierto para abrir una discusión sobre qué hacer en el nuevo espacio que se está construyendo ahí, producto de las modificaciones viales.

A continuación, la declaración pública de la iniciativa Por el plinto y la plaza, esfrita por Fernando Balcells

¿Estamos ante la posibilidad de una protesta masiva de los artistas?

El gobierno anunció que en los próximos días emitirá un pronunciamiento sobre el destino de la Plaza Italia y del plinto que habita en ella, solitario, desde que su jinete fue retirado del lugar. Aparentemente, el ministro del interior no ha recibido información sobre las iniciativas que han surgido desde la ciudadanía y el mundo del arte para abordar los dilemas del plinto y de la plaza desde una perspectiva innovadora y sobre todo ciudadana.

Es difícil entender que un asunto de políticas culturales, tan alejado de la contingencia política, merezca la atención urgente y precipitada del jefe de gabinete. El cierre administrativo e inmediato que se anuncia parece querer detener la iniciativa ciudadana por el plinto y la plaza (1), que ha llamado a un concurso público nacional para recoger las mejores propuestas de arte y arquitectura pública para ese lugar único.
El concurso, abierto en marzo y que cierra en septiembre, busca propuestas que consideren las miradas contemporáneas de las artes, la información a la ciudadanía y una visión puesta más en el futuro que en la celebración de pasados respetables pero que obedecían a desafíos muy distintos de los actuales.
En julio está convocado un gran coloquio en el CCLM -que ha acogido esta inquietud ciudadana por los símbolos de su historia- y que congregará a artistas e intelectuales provenientes de todas las sensibilidades del espectro cultural.

¿Cómo explicará el gobierno la negativa a escuchar lo que se plantee en ese encuentro?

El plinto lleva cuatro años ocupando el lugar de símbolo de las tareas pendientes de nuestra cultura política. ¿Acaso hay aquí una transacción entre izquierda y derecha, invencible pero al precio de ser inconfesable?

Aunque no lo parezca, el destino del plinto y de la plaza marcará decisivamente el futuro del país. Las autoridades políticas parecen saberlo y se apuran en cerrar el debate. Por otro lado, parecen no entender la envergadura y el sentido que tiene cerrar los debates fundamentales antes de tiempo. Estamos ante la posibilidad de un conflicto permanente y de gran envergadura entre instituciones políticas y el mundo del arte y la cultura.

(1) La iniciativa por el plinto es apoyada por cientos de artistas y escritores, entre ellos seis premios nacionales de arte y de literatura; Eugenio Dittborn, Cecilia Vicuña, Gonzalo Diaz, Elvira Hernández, Paz Errazuriz, Raúl Zurita.

Más información en por el plinto y la plaza