Detectives del Grupo Especializado en Bienes Robados de la PDI lograron ubicar dos esculturas italianas que fueron sustraídas hace 7 años desde la parroquia San Antonio de Padua, ubicada en el sector El Almendral de la comuna de San Felipe.

Según los antecedentes aportados por la policía civil, las obras de arte corresponden a dos imágenes de ángeles tallados en madera, que datan de 1872, fecha en que fue construido el templo y donde permanecieron hasta septiembre del año 2009, cuando fueron sustraídas desde el frontis del lugar.

Tras diversas diligencias investigativas se pudo establecer que las obras se encontraban actualmente en la ciudad de Santiago, en poder de un comerciante y restaurador de antigüedades en la comuna de Renca, quien las sometió a un proceso de barnizado para modificar su color y mantenerlas ocultas en su taller, a la espera de ser comercializadas de manera clandestina.

Las especies, avaluadas en un total de 30 millones de pesos, fueron recuperadas por la PDI y trasladadas a la parroquia -que es Monumento Histórico Nacional- para hacer entrega oficial a la comunidad católica.