La Moneda desmintió la información difundida por El Mercurio respecto al rol del embajador en Brasil, Jaime Gazmuri, en el apoyo entregado por el PS al Gobierno de Dilma Rousseff.

Según la publicación, Gazmuri habría comunicado a la mesa directiva del PS, el interés del canciller Mauro Vieira en que ese partido explicitara su respaldo al Gobierno brasileño en medio de la crisis.

El vocero de Gobierno, Marcelo Díaz, descartó la versión, calificándola como “una invención”.

Sin embargo, la presidenta del PS, Isabel Allende, si bien descartó que el embajador fuera intermediario, reconoció que la decisión de respaldar por escrito al gobierno de Dilma Rousseff, se originó tras una reunión clave con Gazmuri.

“La mesa tomó la decisión, como partido, de redactar una carta donde se expresa que no compartimos que haya un tipo de desestabilización a un Gobierno elegido democráticamente”, explicó Allende.

El senador del PPD, Jaime Quintana, sugirió que la cancillería debe analizar la situación, ya que “no corresponde que embajadores intervengan en asuntos propios que son de un partido”, sostuvo.

Ernesto Velasco, en tanto, presidente del Partido Radical, dijo esperar que la misiva del PS no represente al Gobierno de Michelle Bachelet.

El jefe de la bancada de diputados del PPD, Jorge Tarud, fue más allá y llamó a terminar con “este tipo de reuniones informales”, donde no queda constancia de lo que se acuerda. Asimismo, indicó que su posición también aplica para los temas relacionados con La Haya.

Tarud anunció que incluso no asistirá a un encuentro programado con el canciller Heraldo Muñoz.