Levantando escombros a punta de palas y maquinarias, la Junta de Vecinos N° 29 de Tongoy se ha organizado junto a los delegados, pobladores y voluntarios para ordenar y canalizar las donaciones de ropa, agua y alimentos que llegan al Centro Comunitario El Camote.

La situación que vivieron los lugareños tras el fuerte terremoto y posterior tsunami que azotó la localidad dejó cuantiosos daños en el casco histórico del balneario, arrasó con casas y fuentes de trabajo.

Tongoy ha sufrido una devastadora crisis por la catástrofe que golpeó nuestras costas, a casi una semana de lo ocurrido ya estamos saliendo de la desesperación pero hasta ahora, mucha gente no tiene donde dormir y algunas no tienen qué comer. Hay mucha gente que ha perdido absolutamente todo y necesita con urgencia que podamos llegar con una mano amiga”, indicó Raúl Sanders, secretario y miembro de la Junta de Vecinos N° 29. 

Día a día, cientos de jóvenes voluntarios llegan a la localidad de Tongoy con palas, carretillas y escobillones para limpiar la plaza de la costanera, casas y locales de damnificados. Andrés Ogalde es uno de ellos, quién motivó a un grupo de personas de Coquimbo, a través de facebook, y fueron visitando los distintos lugares que fueron golpeados con la fuerza de la naturaleza.

Yo veraneo en Tongoy desde muy chico y verlo así me dio mucha pena. Para quienes se vieron perjudicados con esta catástrofe o perdieron su trabajo es duro y por eso los jóvenes venimos a solidarizar con los pescadores y los tongoyinos de esfuerzo”, indicó

Julia Véliz, una de las personas damnificadas perdió parte de su hogar y su fuente de trabajo, comentó que como de costumbre, se preparaba para esperar a los turistas que visitarían el balneario en fiestas patrias pero el tsunami se encargó de llevarse todos sus ahorros.

“Con mi marido esperábamos con ansias las fiestas y habíamos invertido mucho dinero en abastecerlo para esperar a los turistas pero quedamos con menos de la mitad de lo que compramos porque tras el terremoto no pasó ni 10 minutos y el tren de olas ya había entrado a nuestro hogar”, indicó Véliz.

Ahora, para los tongoyinos se viene un camino largo de reconstrucción y levantamiento, es por ello que Raúl Sanders es enfático en solicitar ayuda y colaboración de los ciudadanos de la Región de Coquimbo, pero también del resto de los chilenos y de las empresas privadas.

“Invito a las personas y sociedades que puedan colaborar, que nos apoyen con esta cruzada solidaria a través de materiales de construcción, clavos, cemento y maquinaria”, manifestó. Recordando que aún faltan muchos productos de aseo personal como jabón, shampo, papel higiénico, desodorante, paste y cepillo de dientes y artículos de limpieza como cloro y lavaloza.

Cabe destacar que las donaciones reunidas en el centro de acopio, han sido canalizadas y repartidas a todos quienes perdieron o sufrieron daños a su vivienda o su fuente laboral.

Como una forma de alentar a esas familias, Celta colaboró con esta causa y donó las primeras 20 camas matrimoniales equipadas con sábanas, cobertores y veladores.

Por dicha entrega, el gobernador de la Provincia de Elqui, Américo Giovine, quién se encontraba en Tongoy destacó la participación de las organizaciones vecinales que gestionaron esta colaboración.

“Es importante el trabajo que hacen las comunidades organizadas como las juntas de vecinos, sobre todo cuando va en solidaridad de sí mismos, de su gente y sus vecinos. Hoy día, después del tremendo drama que ha acontecido en la Región de Coquimbo, particularmente en la localidad de Tongoy, es vital que los organismos se reúnan y trabajen por levantarse”, concluyó.

Camila Pérez

Camila Pérez Mancilla