Cuando en abril se le preguntó a Jordi Castell si contraería matrimonio con su pareja en Argentina, aprovechando que en el país trasandino se legalizaron las uniones homosexuales, el conocido fotógrafo fue tajante: “el día en que yo me case, me voy a casar en mi país, porque ahora nos podemos casar en Chile, los homosexuales y las lesbianas”.
Desde luego, aquella situación cambió desde que se promulgara la ley de Acuerdo de Unión Civil (AUC), que permite a las parejas del mismo sexo formalizar su unión y patrimonio ante el Registro Civil. Y en concordancia, el ex panelista de “Buenos Días a Todos” también anunció que se acogería a la nueva legislación para casarse con Vicente García, su compañero desde hace más de 5 años.
“Me voy a casar, por supuesto que me voy a casar. Sí. Pero no por la cosa mediática que todos creen que lo voy a hacer. Porque el casarse significa, enhorabuena, estar protegidos los dos cónyuges por ley, por el tema de herencia. No (estoy esperando que exista matrimonio igualitario) porque ya con la unión civil somos los dos partícipes de nuestro capital”, indicó en el programa Más Vale Tarde de MEGA.
“Sí, por supuesto (que voy a suscribir el acuerdo de unión civil). No (he pedido fecha) todavía. Sí pues, obvio que lo vamos a hacer, muy pronto. ¿Pero sabes por qué? Por eso. Estoy tranquilo, porque siento que la unión civil lo que viene es a tratar dignamente a todos por igual, tanto a hombres como a mujeres, hétero u homosexuales, lesbianas, homosexuales”, agregó en conversación con Álvaro Escobar.
Para Castell, el tema de la unión trasciende muchos factores. Uno de ellos es el rito, la demostración pública de que dos personas que se aman quieren construir su vida juntos. Sin embargo también está el hecho, mucho más pragmático, de que su pareja será quien herede su patrimonio.
“El día en que yo me muera, que puede ser mañana, pasado mañana me pego en la cabeza, quedo en coma, da lo mismo, no quiero que las cosas que yo he construido, que me he ganado trabajando, se diluyan en cualquier parte. Quiero que el hombre con el que construí mi casa, con el construí mi vida, el hombre que me soporta todos los días, se quede con todo, ¡obvio! Estoy en paz, principalmente por eso, porque me quedo con la tranquilidad de que él va a quedar como heredero, como lo haría en cualquier matrimonio hombre-mujer”, recoge Glamorama de sus declaraciones.
“Me encantaría adoptar una niñita”
Pese a todo, el antiguo rostro de Chilevisión sabe que el AUC es sólo el comienzo, ya que aún no permite uno de los grandes anhelos de Castell: formar una familia con hijos. En este punto, se manifestó a favor de la adopción de que las parejas homoparentales también puedan recibir hijos en sus hogares.
“Me encantaría que fuera una niñita. ¡Imagínate cómo la vestiría! ‘¡Ya! ¡Andate a clase de piano después vuelves y…!’ ¡Imagínate! Y me encantaría que fuera de otra raza. Me encantaría adoptar y que fuera, no sé, coreana, china, vietnamita, negra. Me encanta la idea de que, a través de la adopción, pueda insertarse gente en un país que tiene que entender que parte de ser educado es ser inclusivo y respetar la diferencia”, fueron las palabras del fotógrafo.
“Estamos hablando no sólo en términos sexuales o valóricos, en términos raciales también. Que haya niños que puedan ir a un colegio y que tengan dos papás o dos mamás, en vez de papá y mamá, y que los compañeros de curso acepten eso, y que todos puedan convivir y jugar a la pelota tranquilos, o ir a estudiar matemáticas tranquilos”, concluyó Castell.