Un día antes de la fecha oficial, ayer se celebró el Día Nacional del Pisco en La Serena. Y dentro de las actividades hubo una exposición en la Plaza de Armas, donde la comunidad pudo conocer detalles sobre la historia de la denominación de origen del pisco chileno. Algo donde la Región de Coquimbo tuvo y mantiene un rol protagónico.

Pablo Lacoste Gargantini, doctor en Historia y Estudios Americanos, es el autor de una publicación de la Asociación de Productores de Pisco A.G, que se estuvo distribuyendo durante la actividad de ayer a los presentes. “Reseñas. Historia del Pisco Chileno” es el título de este valioso texto, cuya presentación estuvo a cargo de Pelayo Alonso Zamora, presidente de la Asociación.

“En esta senda de reconocer y valorar la historia de nuestro pisco, establecimos un convenio de trabajo con el historiador señor Pablo Lacoste Gargantini, Doctor en Historia y Estudios Americanos, Mención Relaciones Internacionales de la Universidad de Santiago (USACH), quien ha realizado una serie de estudios y publicaciones de la vid, el vino y el pisco en Chile y América Latina”, precisó el directivo.

En la publicación se parte señalando que, entre los pioneros de la industria del pisco en América del Sur, se encuentra un destacado hijo del Elqui, Pedro Cortés y Monroy, marqués de Piedra Blanca, Huana y Huanilla (La Serena, 1651-1717), uno de los actores clave en la producción de aguardiente de uva en el Chile del siglo XVII, proceso en el cual sentó las bases para el surgimiento del pisco.

El investigador destacó que la primera pisquera de América fue la Hacienda La Torre, ubicada en el valle de Elqui, en el primer tercio del siglo XVIII. Su propietario era un vecino del lugar, el capitán Marcelino González Guerrero, destacado político y empresario que llegó a ser corregidor de Coquimbo.

La memoria de la Hacienda La Torre y la tradición de la temprana elaboración del pisco, se consolidaron en el valle de Elqui, lo cual fue reconocido por el Estado en 1936, cuando tomó la decisión de cambiar el nombre de la localidad de La Unión y pasar a llamarla Pisco Elqui.

En el libro igual se consignó que, en lo que se refiere a la tradición pisquera del valle del Limarí, también tiene su relevancia histórica junto con los valles del Huasco y Elqui. A diferencia de éstos, la trayectoria del Limarí es menos conocida, porque los archivos han comenzado a examinarse en forma más tardía. El autor subraya el crecimiento de los últimos años, hasta constituir el principal centro de elaboración del pisco en Chile.