Con arraigo nacional, arresto domiciliario y prohibición de comunicarse con los testigos del caso quedó el hermano de Sergio Núñez, quien fuera el jefe de finanzas del ex intendente Raúl Celis. Esto, tras ser sindicado en la audiencia de formalización en el Juzgado de Garantía de Valparaíso como cómplice en el caso de fraude a la Intendencia Regional por malversación de caudales públicos correspondientes al 2% de recursos asignados a deportes en el Fondo Nacional de Desarrollo Regional.

Lo anterior se dio porque los hermanos Núñez habrían presentado documentación falsa en la rendición de cuentas efectuada posterior al proyecto adjudicado a la organización “Juventud Unión y Progreso”, formada días antes de ser ganados los montos por aproximadamente $40 millones.

Los dineros, de acuerdo a la acusación, habrían sido utilizados por los imputados y no destinados a los proyectos en sí. Esto, tras la adjudicación de dos fondos; primero por más de $8 millones y luego por más de $31 millones.

Respecto a cómo se dio el procedimiento, el abogado del Consejo de Defensa del Estado, Javier Rojas, sostuvo que Sergio Núñez revisaba y adjudicaba los proyectos a una sociedad donde su hermano era socio, quedándose con parte de la inversión.

Por su parte el fiscal del caso, Claudio Rebeco, señaló que el hermano de Núñez, quien en ese entonces trabajaba como fiscalizador en la Seremi de Transportes de la región de Valparaíso, habría inducido a terceros para establecer una organización y presentar proyectos al Gobierno Regional, los que estaban sobrevalorados para sustraer la diferencia que se destinó a otros fines, lo que aún está siendo investigado.

Es por eso, dijo el fiscal, que quedan diligencias pendientes, entre ellas revisar algunos peritajes caligráficos y analizar las cartolas bancarias.

Tras esto, se solicitó la formalización de Omar Cerón, quien figura como presidente de la organización “Juventud Unión y Progreso”, según manifestó el persecutor.

En la formalización, además, se dio a conocer que algunas de las facturas falsificadas corresponden a la empresa consultora Sintem, de la cual era socio el hermano de Núñez y la que se creo como un organismo técnico de capacitación -OTEC-, aunque nunca tuvo ese funcionamiento.