El Manchester City de Manuel Pellegrini, flamante campeón de la Premier League de Inglaterra, finalmente fue multado por la UEFA por no cumpli la normativa vigente sobre el ‘fair play’ financiero, es decir, no gastar más de lo que se ingresa.
Cabe recordar que a inicios de mayo se había comunicado al club de Pellegrini respecto a la sanción, con opción de ‘negociar’ su multa con un plazo que venció este viernes, sin lograr acuerdos con el ente del fútbol europeo.
De esta forma, la UEFA multó al equipo del ‘Ingeniero’ con 60 millones de euros, vale decir, 82 millones de dólares. Eso sí, de esa cantidad, se devolverán 40 millones a cada uno “si cumplen las medidas operacionales y financieras dictadas por la cámara de instrucción de la intancia de control financiero de los clubes (ICFC)” de la UEFA.
El organismo continental también castigó al City con una limitación de 25 a 21 futbolistas para la planilla de la Champions League de la próxima temporada. Aunque esa medida podrá ser “progresivamente levantada” si los clubes consiguen “llegar al equilibrio financiero”, precisó la UEFA.
Cabe recordar que las reglas del ‘fair play’ financiero fueron adoptadas en 2009 por la UEFA y tienen como objetivo preservar al fútbol de la “locura financiera”, invitándoles a gestionarse con los medios que producen.
Según las últimas cifras de la UEFA, entre 2007 y 2012 los salarios de primera división en Europa aumentaron de media un 59% (sin contar las fluctuaciones de la tasa de cambio), hasta alcanzar los 9.200 millones de euros en 2012.
En total fueron nueve clubes los sancionados por la UEFA por contravenir el ‘fair play’ financiero. Los otros fueron los rusos Rubin Kazan, Anzhi y Zenit, el búlgaro Levski Sofía y los turcos Galatasaray, Bursaspor y Trabzonspor.
La UEFA había puesto la lupa sobre los 237 clubes que han participado en las competiciones europeas esta temporada.
City y París SG, sospechosos habituales
Los nombres de Manchester City y París Saint-Germain sonaban con insistencia como uno de los posibles sancionados por incumplir la regla de la UEFA de que los clubes no pueden gastar más dinero del que ingresan.
Ambos tienen varios puntos en común. El City pasó en los últimos años a manos emiratíes y el París SG a cataríes, y desde entonces han recibido importantes inyecciones económicas desde el Golfo Pérsico, que les han permitido realizar grandes contrataciones y ganar dos ligas cada uno, incluidas las de esta temporada en Inglaterra y Francia.
“Nuestra ambición de convertirnos en una de las marcas globales del deporte entre los mejores y con mejores resultados no se pondrá en duda por estas medidas”, dijo en un comunicado, poco después de conocer la sanción, el presidente del equipo parisino, Nasser Al Khelaifi.
El dirigente catarí subrayó que su entidad seguirá “invirtiendo en construir un equipo altamente competitivo, mejorar el estadio y desarrollar las infraestructuras de entrenamiento, siguiendo sin tener deudas”.
El club parisino, en ese texto de su presidente, dijo aceptar la sanción de la UEFA “pese al gran obstáculo que constituye no poder luchar con las mismas armas que los mejores equipos europeos”.
El City también envió un comunicado tras conocer la sanción, en el que dijo que ha aceptado limitar a 60 millones de euros sus compras de jugadores para la nueva temporada.
“Eso no tendrá ningún impacto en la actividad de los traspasos previstos por el club. Respecto a los jugadores, habíamos registrado 23 y utilizado únicamente 21 este año”, aseguró el City, que subrayó que está en desacuerdo con la interpretación de la UEFA del principio del ‘fair play’ financiero.