Una denuncia pública efectuó el alcalde de Quillota en compañía de concejales de la zona, respecto a los malos olores provenientes de la planta de tratamiento de aguas servidas El Molino, perteneciente Esval, empresa a la que acusan de ser la responsable por la emanación que existe en el área.

Según el alcalde de Quillota, Luis Mella, la senuncia se sustenta en que una vez se presentó el proyecto por parte de la sanitaria al municipio, se dispuso de una serie de requerimientos, en donde se especificaba que no habrían malos olores.

No obstante, afirman que esto no ha sido respetado por Esval, existiendo un incumplimiento en la Resolución de Calificación Ambiental.

Por ello, la entidad municipal dispuso aplicar una multa, sostuvo Mella.

Asimismo, Mella expresó que existen pruebas concretas de incumplimiento por parte de Esval, que demostrarían que la compañía no ha efectuado los tratamientos y biofiltros.

Eso fue fiscalizado por la Superintendencia de Servicios Sanitarios el 13 de marzo de este año, entidad que determinó que existía deficiencia en los biofiltros, fundamentando que las emanaciones de sulfuro estaban por encima del valor máximo, que es 8 ppm.

Respecto al tema, Gastón Placencio, subgerente zonal de Quillota, recalcó que “somos conscientes de la preocupación de los vecinos y el alcalde de Quillota respecto de esta situación. Por ello, hemos chequeado nuestro sistema de tratamiento, descartando hasta el momento cualquier inconveniente o incumplimiento normativo en la operación de nuestra planta”.

Además, Placencio enfatizó que tomó contacto con el alcalde de Quillota para conocer el detalle y procedimiento aplicado en las mediciones de gases, con el fin de dar certeza del funcionamiento de la planta.