La directora titular de la Orquesta Sinfónica de Santa Fe, la chilena, Alejandra Urrutia deslumbró con su enérgica y destacado manejo de la Sinfónica de Chile en el Cuarto Concierto de la Temporada 2014, denominado “Bella Italia”, durante este fin de semana en el Teatro Universidad de Chile.

Urrutia de tan solo 37 años debutó a comienzos de 2013 con la Orquesta Sinfónica de Chile, donde dirigió los conciertos de extensión que se realizaron al norte del país, por lo que su excelente conexión lograda con los músicos y la respuesta del público, hicieron posible su participación nuevamente como Directora Invitada.

La directora titular de la Sinfónica de Argentina, fue elegida en 2013 como una de las 100 Mujeres Líderes de Chile por El Mercurio y Mujeres Empresarias, destacándose también su colaboración en New York Chamber Players, en Estados Unidos, la Orquesta Sinfónica Nacional de Bolivia; el Ensemble Orchestral de Paris, la Orquesta del National Arts Centre de Canadá, Cabrillo Festival of Contemporary Music Orchestra; Orquesta Sinfónica Provincial de Bahía Blanca, en Argentina; Orquesta de la American Academy of Conducting at Aspen, entre otras

La programación de los días viernes 5 y sábado 6 de abril estuvo compuesta por un colorido repertorio musical relacionado con la península itálica, comenzó con una vibrante interpretación de la obertura “La Gazza Ladra” (“La Urraca Ladrona”), del compositor Gioacchino Rossini, la que se ha convertido en una de las piezas favoritas de los conciertos al resaltar la plenitud de la orquesta con solistas excepcionales en maderas y vientos, así como también destacar el rol de los instrumentos de cuerdas.

A continuación se dio paso a los sonidos de la “Suite Rossiniana”, compuesta por el músico italiano Ottorino Respighi inspirado en “Les Riens” o “Pecados de mi vejez” (como lo describió su compositor), la colección de 180 piezas que Rossini escribió durante su larga jubilación. En esta interpretación la Sinfónica respondió a los requerimientos de su conductora, con una música romántica, delicada y arrobadora.

Respighi, el destacado compositor italiano, había anotado un gran éxito en 1919 con su banda sonora para el ballet Leonid Massine ‘La Boutique Fantasque’, que comprendía orquestaciones de Rossini música de piano de Les Reins (“naderías”), creando y completando de manera posterior “Rossiniana” en 1925.

En esta composición los colores y la vida, típicos de Respighi, parecen absorber con su modernidad a la musicalidad de Rossini a través de sus cuatro movimientos: “Capri e Taormina (Barcarola e Siciliana)”; “Lamento”; “Intermezzo”; y “Tarantella ‘Puro sangue’.

El concierto concluyó con una brillante ejecución global del conjunto orquestal de la conocida y hermosa Sinfonía N°4 de Felix Mendelssohn llamada “Italiana”, en la que se evocan los paisajes turísticos y monumentos del país europeo, los que sin duda pudo transmitir Urrutia y la orquesta, a los asistentes del Teatro Universidad de Chile.