Los ministros de la Corte Suprema se mostraron “abiertos” a estudiar y resolver las recomendaciones que realizó la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA para investigar, enjuiciar y sancionar a los torturadores de los oficiales y suboficiales de la Fuerza Aérea que no quisieron participar del golpe militar y que posteriormente fueron condenados por “sedición y traición a la patria” en un Consejo de Guerra.

El vocero del máximo tribunal del país, Hugo Dolmestch, afirmó que le corresponde al Gobierno, Cancillería y/o el ministerio de Justicia, quienes deben notificar al Poder Judicial de estas recomendaciones para que posteriormente el Tribunal Pleno se refiera al tema, sin exclusiones.

Afirmó que “lo que estamos haciendo, como ésta es una responsabilidad que se le atribuye al Estado como tal, entonces nosotros vemos como una forma procedimental le hemos pedido que el Gobierno nos lo pida para que nosotros resolvamos, porque como le digo cuando se trata de una decisión internacional, como fue en el caso de García Lucero (una persona víctima de la tortura que pidió a la justicia internacional que se investigara y sancionara su caso) el propio gobierno requirió y la Corte de Apelaciones de Santiago designó un ministro en visita. Es decir, que ojalá tenga que comunicarnos de algún modo”.

El ministro Dolmestch se apresta a asistir a partir de este sábado al llamado “Examen Periódico Universal” ante el Consejo de Derechos Humanos de ONU que se realiza en Ginebra, Suiza, cuando la Comisión ha pedido que la Corte Suprema “otorgue un recurso judicial efectivo para la protección de los derechos de las víctimas y sus familiares que le fueron conculcados, en particular respecto al valor probatorio dado a las confesiones rendidas bajo efectos de tortura”.

Asimismo, el ex presidente de la Corte Suprema, Rubén Ballesteros, afirmó que si hay que revisar los Consejos de Guerra lo harán

Ballesteros afirmó que “si se piden investigaciones o diligencias por algún caso determinado, se hará como corresponde. El Poder Judicial chileno, que ha sido reconocido internacionalmente como uno de los más importantes y uno de los más influyente en materia de derechos humanos, está abierto a la investigación, absolutamente, incluido los Consejos de Guerra. Revisión de casos cerrados no, pero nuevas investigaciones sí.

En tanto, el actual presidente del máximo tribunal del país, Sergio Muñoz, resaltó que espera una comunicación oficial para poder entregar una postura oficial sobre las recomendaciones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.