La segunda audiencia a la que asistía el ex presidente peruano Alberto Fujimori, acusado de financiar diarios sensacionalistas que insultaban y difamaban a los opositores a su gobierno (1990-2000), se suspendió este lunes debido a su estado de salud.

La decisión fue tomada por el tribunal que preside la magistrada Aissa Mendoza, por recomendación de los médicos que atienden al acusado, que señalaron que cada audiencia debe tener recesos de 15 minutos cada 45 minutos y con una duración total por sesión de no más de dos horas.

La siguiente audiencia fue programada para el 7 de noviembre por disposición del tribunal, que aceptó además la comparecencia en esa sesión del condenado Vladimiro Montesinos, exasesor presidencial y mano derecha de Fujimori durante su gobierno.

La presencia de Montesinos, que incriminó en este caso a Fujimori la década pasada, fue solicitada por la fiscalía y la procuradoría anticorrupción con el fin que explique cómo funcionó el desvío de 122 millones de nuevos soles (unos 40 millones de dólares) provenientes de fondos públicos para la compra de la línea editorial de los diarios sensacionalistas.

El procurador anticorrupción, Julio Arbizu, expresó su confianza en que Montesinos no cambie su versión inicial, que involucra directamente al ex mandatario en este caso de corrupción.

“Pero si así fuese, hay declaraciones concurrentes que dan cuenta de que Fujimori conocía del desvío de fondos y lo ordenó”, resaltó el procurador Arbizu a periodistas al abandonar el juzgado.

El ex mandatario peruano sufre de hipertensión arterial y fue operado cinco veces para extirparle un mal canceroso en la lengua, que ya fue superado, según informes médicos.

En la audiencia del 7 de noviembre la fiscal Milagros Mora presentará formalmente la acusación contra Fujimori, de 75 años, quien cumple una condena de 25 años de cárcel por violación de derechos humanos y secuestro.

Mora pide que se le condene a seis años de cárcel por financiar con dineros estatales a los diarios sensacionalistas, conocidos como “prensa chicha”, y al pago de una reparación civil de un millón de dólares.

El ex presidente ya tiene otras tres condenas que fluctúan entre 6 y 7 años por delitos de corrupción. En Perú no se acumulan las condenas y prevalece la mayor.

Fujimori comparecerá el martes ante un magistrado de la Corte Suprema que debe decidir si le concede arresto domiciliario o lo rechaza, ante un pedido formulado por su abogado. El ministerio público sostiene que ese pedido es inadmisible.