El equipo de Eduardo Berizzo no podía, ni debía dejar escapar puntos en sus aspiraciones por conseguir el Torneo de Apertura 2013, por lo que tenía que derrotar este sábado como forastero al elenco del campanil que marchaba en el octavo puesto de la tabla.

Los ‘rancagüinos’, a pesar de ubicarse primeros con 21 puntos, no podían confiarse, ya que acompañaban en el primer lugar a Universidad Católica y estaban a sólo tres puntos de los equipos que los acechaban: Cobreloa, Palestino e Iquique, todos con 18 puntos.

Los del campanil, por su parte, llegaban con tres partidos invictos y esperaban dejar los puntos en casa frente a O’Higgins que también mantenía una racha de cuatro partidos sin conocer de derrotas.

El primer tiempo fue como se esperaba, con muy pocos espacios y con una gran concentración de jugadores en el centro del terreno de juego lo que trabó las jugadas y dejó todo en manos de alguna individualidad o genialidad de algún jugador.

Las acciones fueron parejas para las dos escuadras, pero los visitantes se pusieron en ventaja a un minuto del término del primer tiempo, cuando uno de los buenos jugadores de la primera parte, Pablo Hernández, tocó sutilmente ante la salida del portero Muñoz y decretó el 0-1.

La segunda fracción presentó las mismas características que el primero y a pesar de que los dirigidos de Pablo Sánchez tuvieron jugadas claras para anotar la paridad, no lograron derrotar al portero Paulo Garcés, quien se transformó en figura tras salvar varias acciones de riesgo para O’Higgins.

Tras una serie de cambios en ambas escuadras, el encuentro no mejoró y Berizzo comenzó a asegurar el duelo replegando sus lineas y controlando el balón, lo que hizo que los amarillos se desesperaran y comenzaran a jugar al pelotazo.

Finalmente los de Rancagua se quedaron con los tres puntos y sumaron 24 lo que los deja, por el momento, como líderes exclusivos del Torneo de Apertura y a los de Concepción en la medianía del certamen con 16 unidades.