La justicia aumentó a tres años y un día de libertad vigilada la pena contra dos estudiantes universitarias acusadas en Temuco de colocación de bombas artesanales. Tribunal regional modificó la sentencia que les condenaba a 541 días de pena remitida.

En el Juzgado de Garantía de Temuco ambas condenadas, Ariadna Torres Torres y Yaritza Grandón Paredes, aceptaron haber colocado y lanzado artefactos explosivos en la Dirección Regional de Gendarmería y en el cuartel de Fuerzas Especiales de Carabineros respectivamente.

El juez Federico Gutiérrez originalmente les condenó a cumplir 541 días de pena remitida. La fiscalía de Temuco y la Intendencia regional recurrieron de nulidad ante la Corte de Apelaciones y los integrantes de la Primera Sala aumentaron la pena.

El abogado Javier Jara destacó el falló del tribunal que radicó el tipo penal en la colocación y confección de bombas artesanales, lo que está prohibido.

El fiscal Omar Mérida manifestó que con la sentencia de la Corte de Apelaciones se desbarató las imputaciones de montaje.

El abogado José Antonio Macías señaló que todo estaba previamente acordado con el Ministerio Público y que sus representadas señalaron conformidad con lo resuelto.