La Corte Suprema de Kenia confirmó este sábado el triunfo de Uhuru Kenyatta en la elección presidencial del pasado 4 de marzo, rechazando así el recurso presentado por irregularidades del rival y aspirante a la presidencia Raila Odinga, que por su parte reconoció la derrota.
Apenas se conoció la decisión estallaron enfrentamientos entre jóvenes y policías en la región de Kisumu, bastión de Odinga en el oeste del país, constató la AFP. Se registraron al menos dos heridos de bala antes de que los manifestantes fueran dispersados.
Un responsable de la policía en Kisumu indicó, pidiendo el anonimato, que tres personas fueron heridas de bala por los policías.
La policía dispersó además al terminar la tarde a unos 200 jóvenes partidarios del candidato derrotado en el centro de Nairobi.
También se informó de enfrentamientos y tensiones en los barrios pobres. El jefe de la policía de Nairobi anunció el envío de refuerzos a esos sectores.
Los seis jueces de la Corte Suprema estimaron por unanimidad que Odinga perdió las elecciones al cabo de unos comicios “libres, equitativos, transparentes y creíbles”, según el presidente de la mayor instancia judicial del país, Willy Mutunga.
La Corte Suprema, ante quien el primer ministro saliente recurrió tras su derrota frente a Kenyatta, estimó que el presidente electo y su compañero de fórmula, William Ruto, “fueron legítimamente elegidos” presidente y vicepresidente.
Esta decisión no puede ser apelada por lo que el resultado de la elección es definitivo y abre el camino hacia la investidura de Kenyatta, prevista el 9 de abril.
Odinga reconoció su derrota y deseó “buena suerte al presidente electo Uhuru Kenyatta”, de 51 años e hijo del primer presidente de Kenia y uno de los hombres más ricos de Africa.
“La Corte Suprema habló”, y “echar dudas (sobre esta decisión) llevaría a la inestabilidad política y económica”, dijo Odinga. El anuncio de su derrota en las elecciones presidenciales de 2007 frente al presidente saliente Mwai Kibaki desencadenó los incidentes más graves en el país desde la independencia, con más de 1.000 muertos y 600.000 desplazados.
El presidente francés, François Hollande, el primer ministro británico, David Cameron, y la Commisión Europea felicitaron a Kenyatta, lo que se abstuvieron de hacer hasta que se conociese la decisión de la Corte, a diferencia de China y numerosos países africanos.
Kenyatta y Ruto están acusados por la Corte Penal Internacional (CPI) de crímenes contra la humanidad por su presunta participación en la violencia que estalló luego de la elección presidencial de diciembre de 2007. Varios embajadores europeos hicieron saber antes de los comicios que limitarían las relaciones bilaterales a “los contactos esenciales” si ganaba Kenyatta.
La Comisión Electoral había proclamado el 9 de marzo a Kenyatta como el ganador con 50,07% de los votos en la primera vuelta, con sólo 8.000 votos por sobre la mayoría absoluta de sufragios exigida por la Constitución.
El bando de Odinga señaló irregularidades en la lista electoral, durante los comicios y el escrutinio.
Los argumentos de la Corte no fueron publicados aún. “El fallo detallado con las razones de la decisión de la Corte será publicado dentro de las próximas dos semanas”, explicó su presidente.
La decisión de la Corte, creada por la Constitución de 2010, era esperada con gran atención y constituye una prueba para esta institución cuya reputación permanece aún intacta en el país, según los analistas.