La justicia militar jordana inculpó este miércoles de “incitación a la división confesional y doctrinal” a cinco estudiantes universitarios, acusados de profanar un Corán y de “adorar a Satanás”, informó una fuente judicial.

En el caso de ser declarados culpables, los jóvenes, quienes niegan los cargos retenidos en su contra, podrían purgar una pena de hasta tres años de cárcel, según la ley jordana.

La ONG Human Rights Watch pidió el miércoles por la mañana a Jordania que inculpara o liberara a los estudiantes, de acuerdo a un comunicado publicado en la página web de la organización.

Según la ONG, estudiantes acusaron a los cinco detenidos de haber destrozado y quemado un ejemplar del Corán, antes de tirarlo al baño, mientras realizaban “un ritual religioso”.

Human Rights Watch cita a allegados de los cinco alumnos ,que afirman que ninguna prueba de un comportamiento criminal ha sido presentada en su contra.

“Las autoridades deberían investigar también presuntas declaraciones, principalmente las del famoso predicador salafista que pidió la muerte de los estudiantes”, según la ONG.

Esas declaraciones “condujeron a otros llamados a la muerte de los estudiantes, en mensajes publicados en Facebook (…) aumentando la preocupación por su seguridad”, según el comunicado.