Ya se ha enfrentado en la pantalla grande a los nazis, espías soviéticos e incluso al villano galáctico Darth Vader. Pero este martes, el actor Harrison Ford encontró una nueva batalla al manifestar ante el Congreso su oposición a los recortes automáticos promulgadas en Estados Unidos.

“Este mecanismo de financiación tiene serios problemas”, dijo la leyenda cinematográfica de Hollywood, de 70 años, frente a los miembros de la Comisión de Aviación.

La estrella y personaje destacado en la saga “La Guerra de las Galaxias” es un piloto aficionado desde hace veinte años y está especialmente preocupado por los recortes presupuestarios que afectan a la industria de la aviación, los cuales podrían derivar, según cifras oficiales, al cierre de más de 200 torres de control en aeródromos.

El 1 de marzo entró en vigor un importante recorte del presupuesto federal que estimó en 85.000 millones de dólares como consecuencia de la incapacidad de los republicanos y demócratas de alcanzar un acuerdo sobre la forma de establecer el techo de la deuda y la forma de reducir el déficit público.

“Cuando se cierra una ronda, se eliminan todas las actividades asociadas. Esto tiene consecuencias importantes para las pequeñas empresas”, advirtió el actor, que también alertó sobre las consecuencias de estos recortes en materia de seguridad.

Los recortes por un valor de 500 millones de dólares para el presupuesto de la Agencia Federal de Aviación (FAA) también ponen en peligro la lucha contra los incendios, el rociado de pesticidas en los campos o la formación de pilotos.