Escocia derrotó este domingo a Irlanda (12-8), a la que no ganaba en Murrayfield desde hacía 12 años en el Seis Naciones de rugby, un triunfo que le permite soñar con una victoria final en el torneo, del que se han disputado ya tres jornadas.
Inglaterra, con un pleno de tres victorias, va en cabeza, mientras que galeses y escoceses le siguen, con dos triunfos y una derrota.
El XV del Cardo, que ya había ganado en la segunda jornada a Italia (34-10), no lograba dos victorias consecutivas en este torneo desde 2001.
Escocia, no obstante, comenzó mal el encuentro e Irlanda dominó de manera clara en la primera hora del partido, con más de un 80% de posesión del balón, aunque sin efectividad en ataque, lo que provocó que al descanso se llegara con el marcador 0-3 a favor de los irlandeses.
Los escoceses optan aún a la victoria final en el Seis Naciones, aunque para ello deberían ganar a Gales el 9 de marzo en Murrayfield y a Francia en París el 16 de marzo y que Inglaterra, actual líder del torneo y que batió a Escocia por 38-18 en la primera jornada, sufra una derrota en los dos partidos que le restan.
“Estamos contentos, pero todavía tenemos muchas cosas por mejorar. Tenemos que aprovechar las oportunidades que se nos brindan durante el partido”, comentó el entrenador de Escocia, Scott Johnson.
Irlanda dominó el partido de manera estéril y tras su derrota, la segunda consecutiva tras perder contra Inglaterra por 12-6, se queda sin opciones de ganar el torneo.
El sábado habían tenido lugar los otros dos partidos de esta tercera, en los que Inglaterra y Gales se impusieron respectivamente a Francia (23-13) en Twickenham e Italia (26-9) en Roma.
El partido estelar era el de ingleses y franceses, pero los visitantes no pudieron dar la sorpresa y registraron una nueva derrota.
El XV del Gallo, que junto a los ingleses partían como grandes favoritos a la victoria, no comenzaba el torneo con tres derrotas desde 1982. En las anteriores jornadas habían caído con Italia y Gales.
“No hace falta decirme que es el peor inicio en el torneo después de mucho tiempo”, clamó el seleccionador francés Philippe Saint-André, que subrayó, no obstante, que su equipo hizo “cosas buenas durante 60 minutos”.
“Hicimos dudar a los ingleses y, después, nos faltó licidez, precisión en algunos balones importantes”, añadió.
Tras el cierre de esta tercera jornada, Inglaterra sigue con opciones de terminar el torneo con un Grand Slam (pleno de victorias), mientras que Francia tendrá como objetivo conseguir alguna victoria para evitar la deshonrosa ‘cuchara de madera’.
La cuarta jornada del Seis Naciones tendrá lugar dentro de dos semanas. El sábado 9, Escocia recibirá a Gales e Irlanda a Francia, mientras que para el domingo 10 quedará el Inglaterra-Italia.