Ninguna verdad es absoluta, todo lo que aquí se describe viene de la experiencia de personas que aportan, pero lo que es bueno para muchos puede no serlo tanto para otros.

Aún queda mucho por descubrir en el mundo del corredor pues cada día aparecen nuevos aportes que podrían ayudar a desempeñarte mejor. Empieza despacio, con tu propio ritmo. Adapta el entrenamiento a tus necesidades y a tu entorno. Se constante y paciente y descansa si quieres asimilar el entrenamiento. Lo principal es disfrutar corriendo.

Descanso ante todo

El descanso, es en sí, la parte del entrenamiento más importante. Es lo que te permite asimilar todo el trabajo, lo que evita sobrecargas y lo que previene de las lesiones inoportunas. Estas lesiones te pueden hacer perder, en una semana, lo que has ganado en un mes. Para un corredor de maratón de tres horas sería aconsejable que descansase dos días a la semana y el día después de cada competición, así como un mínimo de cuatro días después del maratón. Para corredores de más de tres horas y media, se debería añadir un día de descanso más a la semana. Si te encuentras cansado o te surge alguna molestia muscular no dudes en descansar un día más. Todos aquellos corredores que tienen trabajos que significan un gran desgaste físico, deben ser conscientes de ello y tienen que procurar descansar lo máximo posible. Además de no sobrecargarse con demasiados kilómetros, se deben intercalar entrenamientos fuertes con suaves.

Corre con paciencia

La carrera larga, lenta y continua es la esencia del entrenamiento para el corredor de fondo. Se realiza a una velocidad moderada y sirve para resistir más tiempo corriendo. Oxida totalmente el material energético: carbohidratos y grasas, con gran rentabilidad, pero más lentamente. Los rodajes favorecen la resistencia orgánica general, acostumbran al músculo a usar grasas como combustible y conducen a una rebaja en el pulso basal en reposo, con lo que el corazón se hace más eficaz en su trabajo.

Series y repeticiones

Las series y repeticiones son fundamentales para mejorar la potencia aeróbica y por tanto para seguir mejorando las marcas personales. Las series de medias y largas distancias, los cambios de ritmo, los ritmos fuertes o controlados y las series de cuestas, permiten que el organismo se acostumbre a reciclar el lactato. Debido a la mayor demanda de oxígeno, la eficacia cardiovascular aumenta, se agranda el corazón y se mejora la perfusión sanguínea muscular.

Elonga

Los estiramientos son fundamentales, se deben realizar antes, de forma suave y durante pocos segundos, y después de cada entrenamiento, entonces con más concentración, durante 20 segundos como mínimo, por ejercicio. Se realizan para que los músculos recuperen su estado anterior al ejercicio, disminuyen la sobrecarga, lo que permite un mejor drenaje y estimulan una mayor circulación sanguínea, así se asimila mejor el entrenamiento. Correr muchos kilómetros y no estirar provoca un enorme desequilibrio muscular, que a medio plazo significa lesión.

Utiliza estrategias

Para conseguir una buena eficiencia es necesario trabajar regularmente la técnica de carrera. Correr bien significa adaptar la técnica a las características personales del corredor y, además, es fundamental para mejorar el rendimiento. Hay que diferenciar la eficiencia del fondista, de la eficacia de zancada de los mediofondistas y velocistas. En los corredores de fondo y sobre todo en los maratonianos debe predominar la economía de carrera.

Combina

El Entrenamiento Combinado permite entrenarte paralelamente sin correr. Consiste en practicar varios deportes distintos cada semana. Además de correr puedes andar en bicicleta, nadar, hacer senderismo o realizar largas caminatas. Estas otras prácticas deportivas permiten descansar de la rutina de correr, lo que a la larga siempre será importante y no caerás en una rutina. Otros deportes pueden ser; Tenis, squash, básquetbol, fútbol, artes marciales, etc. Estos se deben programar un día que no se entrene largo ni series, lo ideal es sustituir un día de rodaje por