Evitar proyectos sin armonía arquitectónica y urbanística -como Las Tulipas y el Mall del Centro a una cuadra- es la intención del Plan de Desarrollo Comunal propiciado por la nueva administración, en el que se busca la intervención de la ciudadanía.

Pese al desorden actual del centro penquista, el deterioro de los espacios públicos y su mala utilización, el municipio pretende dar un giro a mediados de marzo, con el inicio de “diálogos ciudadanos” en el marco de la construcción del Plan de Desarrollo Comunal (Pladeco).

La iniciativa ya había sido ventilada por el jefe de gabinete del alcalde, quien ahora explicó que la intencionalidad de fondo es ampliar las decisiones desde las cuatro paredes del municipio a los protagonistas ciudadanos de la construcción comunal.

Álvaro Ortiz evidenció que existe sólo un proyecto de intervención comunal con visto bueno, por lo que las iniciativas que sean propuestas por los estamentos organizados de la ciudad serán todas consideradas, al menos en su instancia de evaluación.

El alcalde ejemplificó el fracaso de Las Tulipas como fórmula de aprendizaje y cambio de actitud al momento de elaborar los planes comunales, que se estructuran cada 4 años.

Juntas de vecinos, asociaciones ciudadanas, entes comunitarios y otros, serán convocados para posteriormente sus ideas pasen a la evaluación final del Concejo Municipal. Un proyecto de largo aliento pero con objetivos claros: cambiar el estado actual de decadencia del centro penquista.