El volcán Copahue no ha presentado variaciones en su actividad, de acuerdo al último informe que se evacuó ayer por la noche.

Así lo indicó el gobernador provincial de Bío Bío, Renato Paredes, quien indicó que hasta el momento se mantiene la disposición del plano operativo, pero que no ha sido necesario operarlo. Sin embargo, se mantiene la alerta a la actividad que tenga el macizo.

El ministro de Minería, Hernán de Solminihac, sostuvo que la columna de cenizas y lava que emana del volcán Copahue, en la frontera que comparten Chile y Argentina, ha disminuido a unos 200 metros y no existiría el riesgo “inminente” de una erupción mayor.

“Se ha mantenido la actividad de forma leve y la columna de vapor y cenizas ha disminuido a una altura de 200 metros, desde un máximo que superó el kilómetro de extensión”, señaló el ministro.

No obstante, las autoridades mantienen este lunes la alerta roja en la zona aledaña al volcán, ubicado en la región del Bío Bío, junto a un plan de evacuación de unas 1.700 personas del lado chileno.

En Argentina, hacia donde apunta el cráter del volcán, las autoridades mantienen la alerta naranja.

Recordemos que el sábado, el volcán, de 2.965 metros de altura, empezó a escupir una columna de cenizas con dirección sureste.

El volcán queda justo en la línea fronteriza en la cordillera de los Andes entre Chile y Argentina.

Un último reporte de la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi) este lunes señaló que “el proceso eruptivo continúa con una intensidad menor y caracterizada por la aparente presencia de un cuerpo de lava en el fondo del volcán, presentando actividad de intensidad baja”.

Agrega que tampoco “se ha reportado la ocurrencia de lahares (deslizamientos de barro y cenizas) por ninguno de los ríos que nacen del volcán”, lo que es considerado el riesgo mayor.