En apasionante encuentro, Cobreloa batió por 4-3 a Universidad Católica en juego válido por la undécima fecha del Torneo de Clausura de Primera División.

El cuadro visitante se mostró mejor desde el inicio, procurándose las dos principales ocasiones para marcar, con disparos de Tomás Costa y Francisco Silva, que fueron controladas por Luciano Palos.

Por eso, no extrañó que Católica se adelantara en el marcador sobre 27′. Pase abierto de Ramos a la izquierda que recibe Roberto Ovelar, quien derrota a Palos con un toque alto para la ventaja parcial de los franjeados.

Cobreloa ordenó sus líneas y se lanzó en ataque a la valla de Toselli, llegando al empate en los 35′, con un cabezazo de Sebastián Pol, quien entró en solitario por la izquierda a conectar ante el golero cruzado.

Poco después, Costa fue expulsado por un brutal planchazo sobre Troncoso, lo que causó el airado reclamo de Sebastián Roco, el que recorrió medio campo para llegar a la posición del árbitro, pero recibió tarjeta amarilla. Al ser encarado por sus compañeros debido a su actitud, Roco pidió el cambio y se sacó la jineta de capitán.

Cobreloa machacó de entrada en el segundo lapso, encabezado por Canío, quien empalmó un centro desde la derecha y derrotó a Toselli (48′).

A partir de allí, los naranjas buscaron explotar las espaldas de la zaga cruzada, lo que pudo permitir la sentencia en los pies de Pol, pero fue a dar en el vertical, aunque en la jugada siguiente, Canío recibió en solitario y con toque sutil ante la salida del cuidavallas universitario clavó la tercera cifra.

Lo que parecía cerrado se transformó en un empate vibrante gracias al empuje de los cruzados y el relajo del local. Un penal de Roco sobre Ovelar que cambió por gol Michael Ríos y un gran remate desde la izquierda de Roberto Ovelar en los 82′ dejaban igualado el marcador.

La anotación del paraguayo volvió a despertar a Cobreloa, que llegó al cuarto tanto con un resumen del partido Una serie de rebotes en área cruzada, no pudo despejar la zaga visitante y en el rebote, Juan José Barros adelantó a los calameños.