Un gran color presidió el desfile de las delegaciones, un momento muy esperado por los atletas, en el estadio Olímpico, en la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de Londres 2012.

Mientras muchas delegaciones optaron por la discreción en el vestir, otras se atrevieron con toques de originalidad como la delegación de la República Checa que optó por un traje azul eléctrico, con toques de blanco, completado con unas curiosas de botas de agua también azules, tal vez en previsión de que pudiera caer algún chaparrón.

La delegación india, encabezada por el luchador Sushil Kumar, optó por el amarillo, que decoró el sari de las mujeres, mientras los hombres lucieron el típico turbante de su país del mismo color.

Estonia también optó por un gris muy brillante, tal vez en recuerdo del frío del norte del país báltico.

La preocupación por la moda había llevado a preguntarse a la abanderada francesa si desfilaría con plataformas o zapato plano, pero parece que la tiradora de esgrima Laura Flessel optó finalmente por la comodidad de un zapato bajo.

Los seis atletas de Liberia, por su parte, desfilaron enfundados en una túnica con los colores azul y rojo de su bandera, al igual que los atletas de Malawi que lucieron unos coloridos trajes amarillos y negros, mientras que Nepal desfiló con su traje típico con chaqueta larga hasta casi la rodilla y pantalón en blanco y negro.

Samoa también desfiló con sus “pareos” típicos en azul marino, mientras que por detrás iba la delegación de Arabia Saudí con los hombres enfundados en sus típicas túnicas blancas, cerrando la marcha tres mujeres, tocadas con el pañuelo musulmán, que serán las primeras saudíes en competir en unos Juegos Olímpicos.

En general las delegaciones occidentales optaron por discretos trajes de pantalón y chaqueta, como hizo España, encabezada por Pau Gasol, cuyas atletas desfilaron con falda roja y chaqueta amarilla, reflejo de la bandera, y los chicos con pantalón negro y chaqueta roja.

En tanto, la delegación chilena hizo su entrada vistiendo un traje oscuro y corbata roja para los varones, y un pañuelo del mismo color para las damas, con Van Laomen a la cabeza, sonriente y luciendo un impecable traje de huasa.

Portugal, por su parte, decidió tocarse con una gorra verde, mientras la mayoría de sus atletas llevaban bufandas con el nombre del país luso.

Estados Unidos desfiló con un simple traje blanco y azul, diseño de Ralf Laurent, mientras que Gran Bretaña recibida con todo el estadio puesto en pie vistió de blanco, con chaquetas de ribetes dorados, diseño de Stella McCartney.

Los atletas israelíes, por su parte, portaban en sus bolsillos pañuelos negros doblados, cuando se cumplen cuarenta años de la matanza de once deportistas de su país en Múnich-72.

La salida de las delegaciones fue uno de los momentos culminantes de la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de Londres y el más esperado por los atletas que a partir del sábado lucharán por las medallas.