El nadador brasileño César Cielo llega a los Juegos Olímpicos de Londres-2012 con el firme propósito de revalidar el oro en los 50 m libre -inédito en su país- y hacerse un lugar en el palco que ocupan los legendarios velocistas Alexander Popov y Gary Hall.

“Quiero ser bicampeón olímpico para continuar los pasos de mis ídolos, Popov y Hall. Sería increíble ser el próximo de esa lista”, dijo Cielo, de 25 años, dos veces campeón mundial y ganador del primer oro brasileño en natación.

El ruso Popov y el británico Hall conquistaron dos oros consecutivos en la prueba de los 50 m en Barcelona-1992 y Atlanta-1996, y en Sydney-2000 y Atenas-2004 respectivamente.

En abril, Cielo impresionó a sus rivales al clavar la mejor marca del año en la distancia con tiempo de 21.38. También espera conquistar una medalla en los disputados 100 m libres, prueba en la que quedó tercero en Pekín, pero que ganó en el Mundial de Roma-2009.

En 2012, su mejor tiempo en los 100 m libre fue de 48.28, lejano de los 47.10 del joven prodigio australiano James Magnussen, de 21 años, que no reparó en provocaciones a los rivales en los últimos meses.

Aun así, el brasileño ya está acostumbrado a la adversidad. Cielo dice estar más fuerte mentalmente desde el episodio que puso en riesgo su carrera en junio de 2011, cuando en un examen antidopaje dio positivo a la furosemida, un diurético prohibido.

El nadador se defendió al decir que fue contaminado por un suplemento alimenticio y terminó sólo con una advertencia. La Federación Internacional de Natación (FINA) pidió tres meses de suspensión, pero el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) consideró que la sustancia no tenía como objetivo mejorar su rendimiento.

Cielo siempre contó con el apoyo de su entrenador ‘Albertinho’ Silva, que lo descubrió cuando aún era adolescente.

“Lo traje de su ciudad natal, Santa Bárbara de Oeste, para Pinheros (estado de Sao Paulo, sudeste) cuando tenía 15 años y desde el primer día en que lo vi nadar percibí que tenía potencial para ser medallista olímpico”, dijo a la AFP.

Cielo, que alternaba sus entrenamientos entre Brasil y Estados Unidos, se unió a comienzos de 2011 el proyecto ‘Rumbo al Oro 2016′ (P.R.O 16), con base en Sao Paulo, que lo prepara junto a otros seis grandes nadadores brasileños para las citas de Londres y de Rio de Janeiro dentro de cuatro años.

“Tengo seguridad que tomé la decisión correcta al regresar a Brasil. No podría tener tan buenas condiciones en otro lugar”, asegura Cielo.

Nicholas dos Santos, Leonardo de Deus, Tales Cerdeira, Vinícius Waked, Henrique Barbosa y Thiago Pereira completan el P.R.O 16, que sigue un régimen de entrenamiento y dieta casi militar, bajo el mando de ‘Albertinho’.

“Estamos ya medio locos. Antes de comer hay que ver la etiqueta, medir grasa, azúcar. Cuando la competición termine, creo que voy directo a la primera cafetería que encuentre y pido 10 sándwiches enormes”, bromea.

Mientras, espera poder saciar su hambre de medallas en Londres.