Varios civiles y miembros de las fuerzas de seguridad murieron en los atentados de esta sábado en Damasco, anunció la televisión oficial siria.
La televisión precisó que los dos ataques fueron contra la dirección de la policía criminal y un centro de inteligencia de la Fuerza Aérea, dando cuenta de muertos entre los civiles y los miembros de las fuerzas de seguridad.
Una de las explosiones se produjo entre la avenida de Bagdad y el barrio Al Qasaa, mientras que la segunda se situó en el barrio de Duar al Jamarik, precisó la televisión.
El canal afirmó además que “según las primeras informaciones se trata de coches bomba”.
El opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) indicó por su parte en un comunicado que varios miembros de las fuerzas de seguridad murieron y otros resultaron heridos en estas explosiones dirigidas contra centros de seguridad, aunque no localizó los lugares de las explosiones.
Varios atentados se produjeron en Siria desde que estalló el 15 de marzo de 2011 una revuelta popular hostil al presidente Bashar al Asad, quien se rehúsa a reconocer la amplitud del movimiento y acusa a “bandas terroristas armadas” de ser los responsables de la violencia que dejó, según el OSDH con sede en Gran Bretaña, más de 9.000 muertos en un año.
El 3 de marzo dos civiles murieron y 20 personas resultaron heridas en un atentado suicida en la ciudad de Deraa, localidad del sur, foco de las protestas, había informado la agencia oficial Sana.
El 6 de enero un atentado sacudió el centro de Damasco y dejó decenas de muertos y heridos, dos semanas después de un ataque similar imputado por las autoridades a Al Qaida y por la oposición al régimen de Bashar al Asad.
El 10 de febrero dos atentados con coche bomba sacudieron Alepo (norte), la segunda ciudad de Siria, dejando como saldo 28 muertos y 235 heridos.