Pakistán decidió este sábado revisar todas sus relaciones diplomáticas y militares con Estados Unidos y la OTAN, tras el incidente en el cual aeronaves de la Alianza mataron a 26 soldados paquistaníes cerca de la frontera con Afganistán, anunció la oficina del primer ministro.

La decisión, que afectará a todos los acuerdos diplomáticos, políticos, militares y de inteligencia, fue tomada en una reunión extraordinaria de los ministros y jefes militares presidida por el primer ministro Yusuf Raza Gilani, según el comunicado.

El Comité de Defensa del Gobierno (DDC) confirmó la decisión de cerrar la frontera afgana a los convoyes de la OTAN, decidida este sábado por la mañana, y pidió a Estados Unidos que desaloje una aislada base aérea utilizada para los bombardeos secretos de los aviones teleguiados de la Agencia Central de Inteligencia estadounidense (CIA) en las zonas fronterizas de Pakistán y Afganistán.

“El DCC decidió cerrar con efecto inmediato a la OTAN/ISAF (Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad en Afganistán) las rutas de apoyo logístico. El DCC también decidió pedir a Estados Unidos que desaloje la base aérea de Shamsi en 15 días”, indicó la oficina del primer ministro.

El Comité también “decidió que el gobierno emprenderá una revisión completa de todos los programas, actividades y acuerdos de cooperación con Estados Unidos, la OTAN y la ISAF, incluyendo las relaciones diplomáticas, políticas, militares y de inteligencia”, añadió.

En junio, Pakistán había pedido a Estados Unidos que dejara Shamsi. Islamabad buscaba limitar las actividades estadounidenses luego del ataque clandestino ordenado por Washington que puso fin a la vida de Osama bin Laden el 2 de mayo no muy lejos de la capital paquistaní.

La embajada estadounidense, que de momento no comentó estas informaciones, había indicado que en la base de Shamsi no había personal militar de Estados Unidos.

El canal de noticias CNN informó en abril que el personal militar estadounidense había dejado la base.