La venta directa de agricultores cubanos a hoteles y otras empresas de turismo, que autorizó el gobierno de Raúl Castro por primera vez en 50 años, satisface un viejo “deseo” de los campesinos y dará un impulso a la producción, opinó el martes un alto dirigente del sector.

La reforma, que entrará en vigor el 1 de diciembre y permite a los campesinos vender sus productos directamente a las empresas turísticas sin necesidad de comercializarlos a través del Estado, “contribuirá a impulsar la producción y calidad de las ofertas”, dijo el líder de los agricultores cubanos, Orlando Lugo, citado por la Agencia de Información Nacional.

La medida, que comienza a poner fin así al monopolio estatal en la comercialización de productos agrícolas que rigió durante medio siglo en la isla, también “cumplirá un deseo de muchos campesinos: ofertar directamente sus producciones a los centros turísticos”, añadió Lugo.

Explicó que “excepto los cárnicos”, “la leche y sus derivados, el café y el tabaco”, se podrá ofertar una amplia gama de productos, entre ellos arroz, frijoles, viandas, hortalizas, frutas y carbón vegetal.

El diario oficial Granma destacó este martes que el turismo, segunda fuente de divisas de Cuba, con ingresos anuales por unos 2.000 millones de dólares, detrás de la exportación de servicios profesionales, importó en 2010 “1.360 toneladas de productos tan comunes como cebolla, zanahoria, col y limón”.

“¿Por qué comprar fuera lo que en ocasiones podemos adquirir en casa?”, se preguntó el periódico del Partido Comunista (PCC, único).

Hasta ahora tres empresas estatales eran las encargadas de comprar y distribuir los alimentos que producían los agricultores, a partir de acuerdos establecidos al inicio de las cosechas, pero la ineficiencia en su gestión dio lugar a numerosas quejas en los últimos años, por pérdidas y deterioro de los productos.

No obstante, la reforma, publicada en la Gaceta Oficial, subrayó que la venta directa de los campesinos a las empresas de turismo no sustituye las ventas al Estado, sino que es “una opción adicional”.

Desde que sucedió en el poder hace cinco años a su hermano Fidel Castro, Raúl declaró la producción de alimentos asunto “estratégico” de su gobierno, pues la isla importa el 80% de los que consume, por unos 1.500 millones de dólares anuales, monto insostenible para sus deprimidas arcas.