El ministro de Interior de Ecuador, José Serrano, advirtió el jueves que si no se “sanciona a los culpables” de la rebelión de centenas de policías contra el presidente Rafael Correa el 30 de septiembre de 2010, los hechos podrían llegar a repetirse con más gravedad.

“Si hoy no se castiga y no se sanciona a los culpables, a los responsables de los hechos del 30 septiembre, no duden en que mañana los hechos, con los mismos actores, se podrían repetir tal vez con más saña y con más brutalidad”, dijo el funcionario ante la comisión legislativa de Fiscalización.

La justicia ecuatoriana ha declarado inocentes a cuatro policías, entre ellos un coronel, acusados de complicidad en el supuesto intento de asesinato de Correa, así como al político Fidel Araujo, un mayor en retiro del Ejército y cercano al ex mandatario Lucio Gutiérrez (2003-2005).

El presidente socialista acusa a Gutiérrez de haber estado detrás de la insurrección que dejó diez muertos y 274 heridos, la cual denunció como un intento para derrocarlo y asesinarlo.

Correa fue agredido por uniformados cuando trató aplacar una protesta policial por reclamos salariales y debió ser rescatado de un hospital, en el que permaneció retenido por manifestantes durante varias horas, mediante una operación militar en medio de tiroteos.

Serrano enfrenta un proceso de juicio político en la Asamblea Legislativa, que fue planteado por la oposición por una supuesta interferencia en la justicia para tratar de generar fallos contra acusados de haber participado en la rebelión policial.