Luego que este lunes hiciera noticia una aplicación para que los católicos pudieran confesarse a través de sus iPhone o iPad, el Vaticano se apresuró en desmentir que este fuera un procedimiento aceptado por la Iglesia.

Confessión | App Store

Confessión | App Store

“No podríamos aceptar de ninguna manera que uno se confiese usando un iPhone”, indicó en un comunicado recogido por Reuters el vocero de la Santa Sede, Federico Lombardi. El prelado indicó que la confesión es un sacramento que requiere la presencia del penitente y del sacerdote, “lo que no puede ser reemplazado por ninguna aplicación informática”.

La aplicación “Confession: A Roman Catholic App” causó revuelo luego de que Reuters informara que la empresa que la programó, Little i Apps, aseguraba que el obispo Kevin Rhoades de Fort Wayne, en Indiana, había autorizado oficialmente a los católicos a utilizarla.

Con ella, el dispositivo guía al creyente en un “examen guiado de su conciencia”, indicando sus pecados y obteniendo a cambio un texto en penitencia. De hecho, los creadores de la aplicación aseguran que recibieron noticias de que una persona había vuelto a confesarse tras 20 años sin recibir el sacramento.

Sin embargo, posteriormente se aclaró que el proceso no reemplaza la confesión, sino que sólo ayuda en el acto de admitir los pecados, teniendo que recurrir de igual forma a un sacerdote para obtener la absolución.

El programa se encuentra disponible en la App Store de Apple donde puede obtenerse por sólo 1.99 dólares (poco menos de 1000 pesos).