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Al menos 15 presuntos rebeldes murieron este martes en un ataque con misiles de un avión sin piloto estadounidense que apuntó contra una zona tribal del noroeste de Pakistán, limítrofe con Afganistán, afirmaron autoridades de seguridad locales.
Este ataque, como casi todos los bombardeos de avión sin piloto estadounidenses de los últimos meses, apuntaron contra Waziristán del Norte, baluarte de los combatientes talibanes paquistaníes y de sus aliados de Al Qaida y cuartel general de los talibanes afganos que perpetran ataques contra la Otan en Afganistán.
Dos tiros mataron al menos diez personas durante la tarde, horas después de que un primer ataque ocasionara la muerte de cinco personas, anunciaron los responsables locales de la seguridad, pidiendo el anonimato.
En total, cuatro ataques de este tipo ocurrieron entre el lunes y el martes.
Por su parte, Washington sigue urgiendo a Islamabad para que lance un ataque terrestre en este distrito semiautónomo, pero el ejército paquistaní dice no estar aún listo para hacerlo.
La campaña de ataques con aviones sin piloto estadounidenses “Predator” o “Reaper”, lanzada en 2004 en el noroeste de Pakistán, se intensificó considerablemente desde mediados de 2008 y los bombardeos con misiles se han hecho muy frecuentes últimamente, algunas veces a diario en ciertas épocas.
Las autoridades estadounidenses califican a las zonas tribales pakistaníes como el lugar “más peligroso del mundo” y donde Al Qaida entrena a sus kamikazes y planea sus atentados en Europa y estados Unidos
