La UDI reordena sus fuerzas locales a partir de divisiones que genera la gestión de Jacqueline van Rysselberghe como intendenta, que en la región pierde apoyos desde la Coalición y divide a los parlamentarios gremialistas.
Si el río suena es porque piedras trae. Así lo expresó un dirigente de la UDI, que prefirió no dar declaraciones, así suman y siguen los parlamentarios locales que optan por acallar sus voces hasta que la directiva de la UDI ordene sus fuerzas y su discurso.
El centro de la polémica es la intendenta Jacqueline van Rysselberghe, quien genera divisiones internas en la coalición que ya llevaron a RN a manifestar su público repudio a la gestión personalista que encabeza la Intendenta.
Jorge Ulloa, diputado presidente regional de la UDI, asegura que antes de un discurso uniforme de la UDI, no expresará ni apoyos ni disconformidad con el modelo Van Rysselberghe.
La polémica se gesta por acumulación de voces detractoras de diversos sectores, y al mismo tiempo por la ausencia de parlamentarios gremialistas al encuentro de jóvenes UDI celebrado el fin de semana. Sergio Bobadilla, diputado de la colectividad, explica que esta ausencia se debe a que la cita no era una actividad para expresar respaldo ni a la Intendenta ni a nadie.
La misma aludida dice estar tranquila, contar con el respaldo del presidente de la República y responderle a él directamente y no a su partido.
Claudio Arteaga, consejero regional de la UDI, dio a conocer que la mesa directiva regional de su partido desarrollará un encuentro a fines de esta semana para congregar a los parlamentarios y los militantes directivos, para analizar la posición que tendrá la UDI respecto al modelo Van Rysselberghe.