El ministro de Educación, Joaquín Lavín, insistió en la necesidad de derogar el estatuto docente, que no permite despedir a los profesores de planta, por considerar que este sistema impide a los directores hacerse cargo de sus establecimientos.

A juicio del secretario de Estado, una de las vías para mejorar la calidad de la educación es a través de un recambio generacional que permita eliminar a los docentes que no logran buenos resultados y premiar a los mejores.

Además recalcó la importancia de que los profesores se abran a discutir este tema, que fue una de las recomendaciones del panel de expertos convocado por el presidente de la República para proponer reformas educativas.

Ante esto, el Colegio de Profesores ha insistido en que el estatuto docente es un derecho ganado, el cual no están dispuestos a transar.