Una violenta tormenta acompañada de tornados azotaba el miércoles el centro de Estados Unidos por segundo día consecutivo, lo que provocó la suspensión de numerosos vuelos.

John Everette en Plixi

John Everette en Plixi

Entretanto en las provincias vecinas de Canadá se registraron las primeras nevadas del año.

Un sistema de bajas presiones sin precedentes se desplazaba hacia el este, lo que condujo a que se emitieron alertas de tornado en siete estados estadounidenses, desde Misisipi sobre el Golfo de México hasta Nueva Jersey, en el noreste.

También fue declarada una alerta de ventisca en Dakota del Norte (norte de EEUU), donde la cola de la violenta tormenta que se formó el martes -llamada “Chiclone” en la blogosfera y los medios, neologismo por “Chicago” y “cyclone”- soplaba hasta a 100 km por hora.

En Manitoba (centro de Canadá) cayeron 30 cm de nieve. La capital provincial Winnipeg “registró el récord de la presión barométrica más baja de todos los tiempos”, informó Environnement Canada.

Al tiempo, el medio oeste estadounidense se abocaba a una amplia operación de limpieza, luego de que miles de habitantes se quedaran sin electricidad el martes por 24 tornados que se llevaron techos, árboles y postes eléctricos, informó el servicio nacional de meteorología.

Hacia mediodía del miércoles el aeropuerto internacional O’Hare de Chicago había anulado unos 150 vuelos y registraba retrasos. El martes fueron anulados unos 500 vuelos.