La menopausia entre las mujeres de las zonas pobres y en altura de Latinoamérica se adelanta a los 43 años de edad e incluso antes de eso, reveló un estudio realizado por expertos mundiales y que fue publicado por la revista “Climacteric”.

Pedro Ibanez en Stock.xchng

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Los investigadores evaluaron todas las condicionantes de las mujeres de los distintos continentes para llegar a este consenso, considerando que en los países desarrollados la menopausia comienza a partir de los 50 años en promedio.

La doctora Paulina Villaseca, ginecóloga de Red Salud UC, quien participó del grupo de investigadores al pertenecer al directorio de la International Menopause Society, expresó que “estos datos son relevantes, considerando que la menopausia tiene un impacto no sólo en la eventual sintomatología climatérica, sino también en la salud uroginecológica y sexual, y en un aumento del riesgo cardiovascular y de osteoporosis, lo que se hace más complejo aún en los lugares en los que no hay equidad en el acceso a la salud para tomar medidas preventivas.

En tanto la revista, dijo que la edad promedio de manifestación menopáusica en las mujeres latinoamericanas es de 48,6 años, tres antes que el promedio mundial, y en los países latinoamericanos más pobres y en los de la población que vive en altura, la menopausia se adelanta a los 43 años o menos.

Explicaciones a esto podrían tener relación con los efectos que produce la falta de oxígeno, o la mala nutrición en el desarrollo.

La sequedad vaginal es uno de los efectos de mediano plazo de la menopausia y está determinada por la atrofia de la mucosa vaginal, la que además de lubricación pierde elasticidad y receptividad.

Ésta puede ser tratada con lubricantes o humectantes vaginales; sin embargo, la mejor manera de mantener el trofismo de la vagina es con estrógenos, más aún si se ha perdido la elasticidad vaginal, ya que éstos logran recuperarla así como también las fibras sensitivas y la vascularización de la vagina que permite la respuesta biológica de excitación.

Entre los efectos de largo plazo está la osteoporosis, ya que la falta de estrógenos incide en la pérdida ósea. En muchas mujeres, ésta se puede prevenir con una adecuada alimentación láctea y de vitamina D, y con ejercicio físico. Otras requieren tratamientos específicos.

Otro riesgo a largo plazo es el problema cardiovascular, determinado por infarto al miocardio y accidentes cerebrovasculares, principal causa de muerte en mujeres mayores de 50. Tras la menopausia se incrementan los factores de riesgo cardiovascular: Aumento de presión arterial, colesterol, sobrepeso y puede aparecer resistencia a la insulina.