En la concertación consideran inviable la incorporación del ministerio público a la mesa de diálogo, como exigen los comuneros en huelga de hambre.

Dirigentes opositores coinciden en que el conflicto ha entrado en un peligroso y preocupante punto muerto.

El senador del PPD por la Araucanía, Jaime Quintana, estimó que las razones son diversas y no sólo la negativa de los comuneros en huelga de hambre a la propuesta del gobierno.

El congresista insistió en que la primera responsabilidad es del ejecutivo, porque -sostuvo- accedió tardíamente al diálogo.

Sin embargo, el senador Quintana dijo que es inviable integrar a la mesa de diálogo al ministerio público y -a su juicio- la vía debe ser la incorporación del poder legislativo.

Por su parte, el vicepresidente de la Democracia Cristiana y diputado por la zona del conflicto, Fuad Chaín, opinó que el movimiento ha entrado en una fase muy compleja y la única salida es que el gobierno se allane a sacar el delito de incendio en lugar no habitado de la ley antiterrorista.

El dirigente también estimó que la exigencia de los comuneros en huelga de hambre de integrar al ministerio público a la mesa de diálogo es inviable.

En tanto, el vicepresidente del Partido Socialista, Álvaro Elizalde, opinó que el punto muerto a que ha llegado este conflicto se debe a que el gobierno accedió tardíamente al diálogo.

Elizalde insistió en que el ejecutivo podría haber retirado ya las querellas por ley antiterrorista sin esperar algo a cambio de parte de los comuneros.