Al menos 25 personas murieron y miles han perdido sus viviendas en los incendios forestales que han arrasado varios municipios en el centro-oeste de Rusia, afectado desde hace varias semanas por una canícula sin precedentes, informaron las autoridades este viernes.

El presidente ruso, Dimitri Medvedev, ordenó este viernes movilizar al Ejército para luchar contra las llamas, anunció su portavoz Natalia Timakova, citada por las agencias rusas.

“El presidente ha ordenado al Ministerio de Defensa movilizar todos los recursos necesarios para ayudar a extinguir las llamas”, dijo la portavoz.

El balance de los los muertos en los incendios pasó a 25 personas en la parte occidental de Rusia, afectada desde hace un mes por una canícula sin precedentes, con temperaturas que se acercan a los 40 grados celsius.

El primer ministro Vladimir Putin viajó al pueblo de Verjniaia Vereia, en la región de Nijni Novgorod (centro) cuyas 340 casas fueron pasto de las llamas en sólo 20 minutos. Dos personas murieron.

El cuerpo de un bombero, cuya muerte había sido anunciada antes, así como los cadáveres de seis habitantes, fueron hallados el viernes en la población de Mojovoie, cerca de Moscú, arrasada en la víspera por el fuego, indicó una responsable del ministerio de Situaciones de Emergencia citada por las agencias rusas. Quince casas fueron destruidas en esa población, indicó además Yulia Jukov, portavoz del comité de investigaciones de la fiscalía local, citada por la agencia Interfax.

Cinco personas, incluyendo un bombero, murieron el jueves en la región de Voronej (centro), donde 21 personas tuvieron que ser hospitalizadas, informó el ministerio de Situaciones de Emergencia. Putin se reunió con los damnificados y prometió que el pueblo será reconstruido antes de que llegue el invierno, a fin de año.

Putin también prometió indemnizar con 200.000 rublos (6.614 dólares) a cada uno de los habitantes, indicó la agencia de noticias ITAR-TASS.

En la misma región, al este de Moscú “dos personas murieron, 1.479 fueron evacuadas y 550 casas ardieron”, anunció la fiscalía local en un comunicado.

Tres hospitales y varios campamentos de vacaciones debieron ser evacuados de emergencia en Voronej, ciudad donde las llamas eran visibles desde los edificios residenciales, según imágenes de la televisión rusa.

En Riazan tres personas perecieron en los incendios, anunció el gobernador Oleg Kovalev citado por la agencia Interfax. Las autoridades declararon a Riazan en estado de emergencia después de que se quemaran 110 edificios en las últimas 24 horas.

“Teníamos una casa, un granero, todo se quemó ¿A dónde iremos? ¿Dónde vamos a conseguir dinero para comprar una casa?”, se interrogaba una joven habitante de Riazam, según las imágenes de la televisión Rossia.

La situación se agravó desde el jueves a causa del viento, que ha aumentado la velocidad de propagación de las llamas.