La reunión del Cuarteto para Medio Oriente, prevista para este viernes en Moscú, pretendía dar el apoyo internacional a un proceso de paz entre israelíes y palestinos, pero todo cambió tras el anuncio de Israel de construir miles de viviendas en un asentamiento de Jerusalén Este.

“La reunión será completamente diferente de lo que se preveía cuando fue convocada”, señaló en Washington el experto Michelle Dunne.

“El objetivo era bendecir las negociaciones indirectas”, impulsadas por Estados Unidos “y enunciar algunas expectativas”, dijo el investigador de la Fundación Carnegie en una entrevista con la AFP.

Sin embargo, las negociaciones quedaron comprometidas a raíz del anuncio de Israel de construir unas 1.600 viviendas en la parte árabe de la Ciudad Santa.

La iniciativa, calificada como un error diplomático por Michelle Dunne, fue lanzada en plena visita a Israel del vicepresidente de Estados Unidos Joe Biden.

Pero no sólo ha causado el retiro inmediato de los palestinos de las conversaciones indirectas. También desató una crisis con Estados Unidos, principal aliado de Israel, que por varios meses intentó desesperadamente revivir el diálogo entre israelíes y palestinos.

La reunión del Cuarteto (Estados Unidos, Rusia, la Unión Europea y ONU) “podría aumentar un poco la presión sobre los israelíes, que están preocupados por su legitimidad internacional”, estimó Nathan Brown, del Instituto Woodrow Wilson, destacando que el grupo “está cerca de la línea dura de Estados Unidos”.

El Cuarteto condenó la semana pasada las nuevas construcciones israelíes, al igual que el gobierno del presidente Barack Obama, la Liga Arabe y los europeos.

Si la declaración que será emitida tras la reunión en Moscú contiene peticiones concretas al gobierno de Israel, será una señal clara de que los estadounidenses pretenden confrontar al primer ministro Benjamin Netanyahu, señaló el analista Michelle Dunne.

Invitada a inaugurar la reunión en Moscú, la jefa de la diplomacia estadounidense, Hillary Clinton, se ha limitado a recordar el objetivo: conseguir una “plena participación de los israelíes y los palestinos”.

“Vamos a ver lo que nos reservan los próximos días”, dijo la secretaria de Estado, y anticipó que hablará por teléfono con Netanyahu antes de partir a la capital rusa este miércoles.

La alta representante de la Unión Europea, Catherine Ashton, y el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, también arribarán a Moscú, después de cumplir una visita extraordinaria a Gaza para observar la situación humanitaria.

La jefa de la diplomacia europea ha acusado a Israel de “poner en peligro y socavar el principio de acuerdo para iniciar conversaciones indirectas”.