Una francesa de 38 años comenzó a ser juzgada este lunes en un tribunal de Coutences, acusada de matar a 6 de sus bebés al nacer y de esconder sus cuerpos en el sótano de su casa, en unos de los casos de infanticidio más graves de los últimos 30 años.

Madre de una adolescente de 14 años, Celine Lesage, pequeña y de cabellos oscuros, podría ser condenada a cadena perpetua por “asesinatos agravados” por haber ocasionado la muerte a seis de sus bebés nacidos entre 2000 y 2007 luego de haber dado a luz sola en su casa y sin que lo supieran las personas con las que vivía.

El padre del bebé muerto en 2007 estaba presente en la vista del lunes entre la acusación civil. El hombre vivía con Celine Lesage desde hacía un año cuando fueron hallados los cadáveres de los recién nacidos.

Fue él quien descubrió por casualidad, en bolsas de residuos, los cuerpos en descomposición de los bebés, que estaban en el sótano del apartamento en el que vivían en Valognes.

El juicio de Celine Lesage se produce menos de un año después del de Veronique Courjault, protagonista de uno de los casos de infanticidio más sonados de los últimos años en Francia.

Su juicio en Tours (centro-oeste) en junio de 2009 desató un vivo debate en Francia sobre la negación del embarazo mediante el cual algunas mujeres rechazan su condición de mujeres embarazadas al punto tal que disimulan las señales físicas que esa situación supone.

Veronique Courjaulf fue condenada a ocho años de cárcel por el asesinato de tres de sus bebés. Los dos últimos tuvieron lugar en 2003 y 2004 en Corea del Sur, donde trabajaba su marido.

El veredicto del juicio de Celine Lesage se conocerá el próximo jueves.