El actor, productor y guionista Mel Gibson está preparando como director una película de vikingos, su primera idea cuando soñaba de niño en dedicarse al cine, y desea recrear el mundo de esta etnia de Escandinavia con actores hablando nórdico antiguo.

Mel Gibson

Mel Gibson

“Quiero ver a alguien que nunca he visto antes hablando en voz baja en un alemán gutural que asuste”, recalcó el hombre que en 1995 dirigió, produjo y protagonizó la vida a finales de 1200 del héroe nacional escocés, William Wallace en la épica “Braveheart” (“Corazón Valiente”).

Como un apasionado de la historia y la religión, Gibson sacó en 2004 “La Pasión de Cristo” donde relata la pasión y muerte de Jesucristo según el Nuevo Testamento, una polémica obra rodada en latín, hebreo y arameo con subtítulos.

En 2006 también produjo y dirigió “Apocalypto”, una cinta de acción y aventura ambientada en las tierras mayas de la América Prehispánica rodada en maya yucateco.

“La primera idea que tuve para hacer una película, mi primer pensamiento sobre ser un director de cine cuando tenía dieciséis años, era porque quería hacer una película de vikingos. Yo quería hacerlo en nórdico antiguo, que lo estaba estudiando en ese momento”, dijo Gibson en una conferencia de prensa en Santa Mónica (California, oeste).

“Es curioso, porque a esa edad piensas, ‘bueno, eso es sólo una idea estúpida, ridícula ¿Cómo voy a ser cineasta? Esa es una idea tonta, sólo una especie de utopía romántica”, contó el cineasta que el próximo viernes reaparecerá como actor en el thriller “Edge of Darkness” después de ocho años sin actuar.

Gibson explicó que prepara el filme vikingo para 2011 con la producción de Graham King.

King, que produce de “Edge of Darkness”, fue el productor de las aclamadas cintas “The Departed” (Los infiltrados, 2006); “Blood Diamond” (2006) y “Gangs of New York” (2002), las tres protagonizadas por Leonardo DiCaprio, cuya presencia está casi confirmada como protagonista de este sueño de Gibson.

“Quiero dar algo real, quiero un vikingo que asuste. No quiero un vikingo que diga, -con marcado acento neoyorquino: ‘Me voy a morir con esta espada en mi mano’”, comentó Gibson en una conferencia donde no paró de hacer morisquetas, gesticular e imitar cada vez que pudo.