Personal de Aduanas del paso fronterizo Los Libertadores, al efectuar la revisión de rutina a los buses de pasajeros con apoyo de sus canes detectores de droga, descubrió una caja de cartón que en su interior transportaba 1,1 kilos de cocaína, oculto en envases de desodorantes ambientales.

El procedimiento se llevó a cabo al detectar una caja irregular entre las mercancías embarcadas, ya que no contaba con la correspondiente identificación. Esta caja, al ser inspeccionada por los canes, arrojó una alerta frenética, originando así su traslado a las dependencias de Aduanas
para corroborar su contenido.

Una vez examinada la caja, funcionarios de Aduanas detectaron dos cilindros de desodorante ambiental marca Lysoform con un peso anómalo, que
al momento de ser destapados y presionar su dispensador, no funcionaron, constatando además que la parte superior de los contenedores presentaban
residuos de silicona.

Al destapar dichos cilindros se encontró una sustancia blanquecina, la cual al ser sometida a la respectiva prueba de campo Narcotest del Servicio de Aduanas, arrojó coloración azul positivo, ante la presencia de Clorhidrato de Cocaína.

El hallazgo fue comunicado al fiscal en materia de drogas del Ministerio Público, quien instruyó que el procedimiento fuera entregado a Carabineros
de la Subcomisaría Los Libertadores.