El ex presidente de la Sociedad Nacional de Minería, Sonami, Alfredo Ovalle, desmintió que su renuncia al cargo se deba a investigación que lo vincula como socio del ex jefe financiero de la DINA como lo indicara el reportaje del sitio Ciper Chile.

A través de un comunicado, Alfredo Ovalle desmintió la relación de su renuncia anticipada a la presidencia de la Sociedad Nacional de Minería, Sonami, con la investigación de antecedentes que lo vinculan como socio en empresas nacionales y extranjeras, al jefe financiero de la DINA, el ex oficial de la Armada, Humberto Olavarría Aranguren, según afirmó el diario electrónico Ciper Chile.

El texto aclara textual “que las sociedades constituidas con algún personero que se sindica como miembro de la DINA, se remitieron al rubro construcción y comercial” negando relación alguna, financiera ni de apoyo, con instituciones de inteligencia de la dictadura.

Desde Buenos Aires, la periodista Mónica González, autora de este reportaje, detalla que el pasado jueves 12 de noviembre, Alfredo Ovalle, entonces presidente de la Sonami, recibió a CIPER en la sede de la entidad gremial, donde fue requerida su versión sobre esta investigación, instancia en la que no se pronunció al respecto.

La periodista aseveró que dentro de los antecedentes que ha recogido, la mesa de la Sociedad Nacional de Minería no tiene algún antecedente puntual de los motivos de la renuncia de Ovalle, excepto que ésta coincide con la entrevista
acerca de los fondos del órgano represor, y su relación con quien fue agente de la DINA, jefe de la Brigada Lincoyán y de investigaciones económicas durante la dictadura.

Según el reportaje, Humberto Olavarría en 1976 se asoció con los abogados Alfredo Ovalle y Raimundo Langlois, “con quienes participó en una red de numerosas sociedades, la mayor parte de ellas creadas mientras controlaba todo el aparato financiero de la DINA.”