Cada año, los bomberos australianos posan semidesnudos en un calendario para juntar dinero en beneficio de distintas fundaciones.

Así comenzaron en 1993 para ayudar a niños de un hospital y obtuvieron tal éxito que comenzaron a replicar esta impresión cada año, ayudando a la fundación.

En esta oportunidad, los bomberos fueron fotografiados en tres diferentes versiones de calendarios: uno, posando junto a tiernas mascotas; otro, junto a animales “salvajes” y otro, el más osado, con poses semidesnudas con objetos propios de su oficio.

Cada calendario tiene un valor de cerca de 10 mil pesos chilenos e incluye fotografías a color de verdaderos bomberos del país que se “sacrificaron” por un propósito benéfico. Hasta la fecha, han podido recaudar más de mil millones de pesos (chilenos) en donación a los niños.

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