Evite los platos especiales, sospeche de cualquier alarde extravagante y prepárese para regatear por el vino: son los primeros tres consejos que el chef celebridad Gordon Ramsay da para mejorar cualquier experiencia en la mesa. Tome nota.

El aclamado cocinero británico, ganador de estrellas Michelin, compartió con la AFP sus trucos para sacar el mayor provecho de una visita a un restaurante, mientras inspeccionaba en Los Ángeles el estudio para su nuevo programa, una versión estadounidense de la serie británica The F Word, en lo que inmediatamente se asocia a un muy común garabato en inglés que empieza con esa letra.

“Los especiales están allí para desaparecer a lo largo de la noche. Cuando tienes una lista de 10 especiales, eso no es especial”, indicó Ramsay en un estudio en Hollywood que está siendo transformado en un restaurante capaz de servir a 100 comensales.

Además, da un cuarto consejo: el británico de 50 años recomienda reservar una mesa para al menos tres personas si está planificando una comida romántica para dos. Esa mentira blanca le permitirá mejorar la experiencia evitando “estar arrinconado como una tranca para la puerta”.

Siempre saque el mayor provecho del vino, solicitando la lista “bin end” en la que están las botellas con las etiquetas deterioradas, los añejos a punto de picarse o de esas casas de vinos menos famosas de las que el restaurante se quiere deshacer. Todas más baratas.

“Tenemos miedo de hablar con los sommeliers porque creemos que nos van a estafar. Haz que venga el sommelier con una excelente copa de vino o una gran botella y tú pon el precio. Asegúrate que sea menos de 30 dólares”, dijo.

¿Famosa?

Uno de los cuatro chefs en Gran Bretaña con tres estrellas Michelin y dueño de una cadena de restaurantes en todo el mundo, Ramsay sabe leer entre líneas cualquier menú y sostuvo que hay platos que no ordenaría en cualquier lado.

“Cuando vienen y te dicen que es ‘la famosa lasaña’, pregunto ¿qué la hizo famosa? (…) Comienzan adornando los platos con terminologías como ‘enloquecedor’ , ‘famosos’, ‘los mejores del país’… ¿Quién dice eso? ¿Quién los bautizó así?“, insistió.

Ramsay, quien estuvo bajo las órdenes de Albert Roux, Marco Pierre White y Guy Savoy, es famoso por su modo procaz de hablar en la televisión.

Ocurrió cuando por error un capítulo sin editar de Hotel Hell fue televisado en Gran Bretaña en plena tarde un día de abril. En 15 minutos Ramsay usó la palabra “f” seis veces antes de que fuera sacado del aire.

Su reacción a esta controversia es impublicable, al menos para la AFP. Pero el mensaje en general es que el canal no debe calentarse por lo que fue, al fin de cuentas, un error de programación.

Hipocresía

Lo que Ramsay piensa de su reputación por su habla obsceno tampoco lo resiste este papel, pero palabras más, palabras menos, siente que hay hipocresía en la forma en como es aislado por la prensa por su “lenguaje laboral”.

No es muy distinto, considera, de otros profesionales “que usan el lenguaje coloquial en su trabajo”, aunque no sería descabellado afirmar que disfruta de esta fama que se le atribuyó.

Y aunque Fox insiste que la “f” se refiere a “food” (comida), “family” (familia) y “fun” (diversión), todos saben qué esperar de un show llamado “The F Word” y conducido por un muy grosero chef.

El programa se estrena el miércoles. Será en vivo y la única protección de la cadena será un pequeño atraso de cinco segundos para dar la posibilidad a apretar a tiempo el botón del sonido “bip”.

Y ya el chef advirtió que no envolverá nada “en tela de algodón”.