El Instituto de Salud Pública informó que la codeína, fármaco utilizado comúnmente en jarabes para la tos y el tratamiento del dolor medio a moderado, no debe ser usado en menores de 12 años. En el caso de adolescentes debe indicarse de manera restringida.

Su uso podría tener efectos adversos graves, como depresión respiratoria e incluso la muerte, según un análisis realizado por la Agencia de Medicamentos y Alimentos de EEUU (FDA) y el Comité de Riesgos en Farmacovigilancia de la Agencia Europea de Medicamentos.

Desde el año 2012 hasta la fecha el Centro Nacional de Farmacovigilancia del ISP, registra 9 notificaciones de sospechas de reacciones adversas a codeína en pacientes entre 1 y 17 años.

Aun cuando ninguna de estas notificaciones involucra depresión respiratoria o muerte asociada a codeína, el ISP decidió emitir una nota informativa para comunicar a la comunidad y a los profesionales de la salud, de modo que puedan incorporar estas recomendaciones a su práctica diaria.

Desde 2012, el ISP, a través del Subdepartamento Farmacovigilancia, asesorado por su Comité de Expertos, evalúa el perfil de seguridad de la codeína, por lo cual ha emitido una resolución para que los titulares de registro sanitario de productos que contiene el fármaco, actualicen sus folletos de información al profesional y paciente, los que deben señalar lo siguiente:

-La codeína no debe ser usada en niños menores de 12 años. En niños entre 12 y 18 años, no debe ser utilizada para el manejo del dolor tras ser sometido a una intervención de amigdalectomía y/o adenoidectomía a causa del síndrome de apnea obstructiva del sueño.

-La codeína no debe ser usada para el tratamiento de la tos y el resfrío en niños menores de 12 años.

-No se recomienda su uso en adolescentes entre los 12 y 18 años cuya función respiratoria pudiera estar alterada, incluyendo trastornos neuromusculares, enfermedades cardiacas o respiratorias graves, infecciones de vías respiratorias altas o pulmonares, politraumatismo o procedimientos de cirugía importantes.

-La codeína no debe ser usada en madres que amamantan, ni en pacientes para los que se haya comprobado que son metabolizadores ultrarrápidos del fenotipo de la CYP2D6.

Si los pacientes sienten que pueden estar teniendo una reacción adversa por codeína o cualquier otro medicamento, la recomendación es dirigirse al centro de salud más cercano y comunicar su sospecha al médico, químico farmacéutico o cualquier otro profesional de la salud. Si es posible, sugiérale al personal de salud que notifique el caso.

Se recuerda finalmente a los profesionales de la salud, que deben notificar al Programa Nacional de Farmacovigilancia del departamento Agencia Nacional de Medicamentos (Anamed) del ISP, cualquier reacción adversa a medicamentos de la que tomen conocimiento.