Escoltados por carabineros llegaron los trabajadores de la empresa Isla Grande para iniciar el derribo del muro que separa la población Legua de Emergencia con la Villa Los Jardines 2 de San Joaquín.
La polémica medida busca debilitar el muro de más de 10 cuadras de extensión, pero que ha sido rechazada por los vecinos del lugar, quienes aseguran que es una medida de protección ante las constantes balaceras.
El alcalde de San Joaquín, el PPD Sergio Echeverría, está a favor de la medida pero acusó al Gobierno de apresurar los trabajos con fines electorales y recalcó que aún no están los permisos municipales para ejecutar su demolición.
Las obras quedaron suspendidas, aunque se logró cortar una parte del muro para iniciar su destrucción. En tanto, el subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, aseguró que iniciaron planificaciones con las policías y el municipio para que no existan dificultades.
Cabe recordar que el plan trata de mejorar el trabajo de seguridad y acceso policial a estos sectores y fue acordado por la Intendencia y el Serviu Metropolitano.
