El vicepresidente de la Asociación Nacional de Funcionarios de Aduanas (Anfach), Hugo Valdés, denunció que sólo han recibido amenazas -y ninguna respuesta ni invitación al diálogo- en su segunda jornada de paralización de funciones.

Asimismo, destacó que la adhesión este jueves fue similar a la de ayer miércoles: entre un 90% y 95%, lo que ha paralizado el comercio exterior, ralentizado la atención a usuarios y el tráfico de vehículos en los puestos fronterizos.

En ese contexto, el dirigente pidió al Gobierno “intentar resolver el conflicto, en lugar de amenazar a los trabajadores”.

Los empleados aduaneros respondieron a la Dirección de Presupuestos (Dipres) que sus condiciones para retomar la mesa de negociación son la presencia del Ministerio del Interior, que el Gobierno retire su última propuesta y que cumpla con el acuerdo firmado en noviembre de 2016.

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Dicho protocolo establecía que la dotación de planta del servicio aumentaría a 1.700 funcionarios en 2018, pero el Ejecutivo propuso un plan paulatino que terminaría en 2022.

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El ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, señaló que La Moneda respetará el protocolo, por lo que pidió a los trabajadores retomar el diálogo.

Los funcionarios de Aduanas demandan, además de exigir el cumplimiento del protocolo de acuerdo, que el proyecto de ley de fortalecimiento del servicio ingrese al Congreso a más tardar el 31 de julio de este año.